¿Quieres saber qué siente tu mejor amigo cuando come en sutraste? Wild Dog revoluciona el concepto ‘pet friendly’ paramostrártelo. Hotdogs, hamburguesas y papas fritas son servidas enrecipientes metalizados que te recordarán a los de tu mascota.
Mientras saboreas la gastronomía ‘american style’, tu perropuede echarse una chela. Sí, has oído bien, este restaurantepoblano con sucursales en Sonata y Angelópolis, ofrece la BeerTerrier, una bebida embotellada sin alcohol especialmente diseñadapara satisfacer las necesidades de hidratación de los canes.Nace la idea de hacer todo un concepto gourmeten torno a la idea de los perros, por los perros calientes”,explica uno de los fundadores, Patricio Bautista. “Lo quisimosllevar a un punto de responsabilidad social donde nada más fuerair a tomar un hotdog y estar envuelto en un ambiente alusivo a losperros, sino también ver la manera de que podamos apoyar estacausa con la fundación Ángeles Peludos”. Para apoyar aesta protectora de animales, Wild Dog vende galletas a los perrosde sus comensales, que pueden comer juntos en la terraza. Losperros y gatos en adopción son anunciados en un gran pizarrón.“Tenemos una alcancía para que nuestros clientes puedancolaborar”, añade. “Estamos trabajando en meter un menúdiseñado especialmente para que los perros puedan comer algo,acompañando la cerveza”.
El café All Day no ha introducido todavía un menú paramascotas pero sí brinda, además de agua, galletas como obsequio atodas aquellas que crucen su puerta, en la calle 7 Oriente 403.“Desde el principio, hace ya 10 años, está abierto como PetFriendly, tanto el área de bar, como el café. Todos pueden entrarcon mascotas, no tienen que ser exclusivamente perros, han traídohurones, una boa”, enumera el encargado, Jezreel Soriano.“Aunque es un poco raro, ése es el chiste de que puedan traer asus mascotas”.
Los animales pueden andar libremente por cualquier rincón de lacafetería. “Nunca hemos tenido ningún problema con lasmascotas, a veces son un poquito más complicados los clientes”,sonríe.
Más reducido es el espacio que ofrece Perro Caffé, en elnúmero 304 de la calle 25 sur. Esta cafetería permite que losperros y sus dueños convivan en su terraza, donde estándistribuidos estratégicamente varios trastes con agua.
¿Y EL DESAYUNO?
Un jugo de naranja, unos huevos revueltos y un puñado decroquetas para perro de la mejor marca. Éste menú es común encada vez más cafeterías poblanas, que consideran a las mascotascomo unos comensales más. ¿No te quieres separar de tu mejoramigo durante las vacaciones? Salgan a comer.
Con un colorido sombrero “Hachi”, espera impaciente en elregazo de su dueña a que llegue su pastel. Mientras suenan lasMañanitas una de las encargadas de Capetería, negocio ubicado enel número 1204-A de la calle 39 Oriente, se apura a colocar sobreun plato el dulce, en forma de hueso y elaborado con ingredientesidóneos para canes.
“Cumple seis años pero parecen muchos menos”, piropea sudueña, permitiendo que el pequeño schnauzer negro se abalancesobre la mesa para olisquear su comida. Sólo unos pasos másallá, dos chihuahuas se disputan una galleta de avena, mientrassus dueños terminan de desayunar. Ajeno al alboroto, un yorkshirerecién llegado guía a sus amos entre las sillas. Aquí lo que entendemos es que los perritos, son perritos,los gatos son gatos, los conejos son conejos, obviamente van aladrar, se ponen un poco nerviosos o se emocionan, pero nosotros loentendemos, lo que tratamos es que el perrito no salga de casa nadamás para ir al baño o para ir al veterinario, sino también paratener una experiencia agradable”, explica Adriana Castillo,encargada de Capetería.
Paleta helada de carnaza, pastel carnívoro, galletita saludablede avena o bocadito de atún son algunos de los platillos incluidosen el menú. Los poblanos que acompañen a los perros puedendegustar un buen café, unos huevos estrellados que imitan la carade gato, un sándwich de salchicha con la huella tostada de unhueso o un smoothie Agaporni. “Toda la carta está basada en eltema de animalitos”, recuerda Castillo.