El gobierno estatal perfila la construcción de un nuevo parque ecoturístico en las inmediaciones del Lago del Alchichica, en la zona que comprende el Área Natural Protegida (ANP) Lagos de Tepeyahualco y Guadalupe Victoria. No obstante, en un primer paso, la autoridad evaluará la viabilidad del proyecto desde el enfoque medioambiental y social.
Mediante una licitación pública, la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial (Smadsot) dio a conocer que un equipo de especialistas ponderará el impacto que la instauración de un eventual complejo de turismo ecológico en las inmediaciones de Alchichica podría generar al entorno.
Con las características metodológicas de un estudio técnico, la empresa que sea elegida por el gobierno del estado deberá dividir el proceso en cuatro etapas: la evaluación del marco jurídico, la recopilación de necesidades y opiniones de la comunidad, el análisis geológico y biológico de la zona, así como la elaboración de un plan arquitectónico para el ecoparque.
Para ello, el equipo deberá integrarse por seis profesionales titulados en las materias de Ciencias Sociales, Medio Ambiente o Ecología, Biología, Arquitectura, Desarrollo Urbano y Regional, y Geomática.
A partir del 1 de noviembre, el personal contratado deberá recopilar toda la información referente al contexto jurídico del lugar y su condición como ANP. Esto permitirá definir un mapeo de responsabilidades y facultades de las autoridades de los tres niveles de gobierno, además, permitirá evaluar las condiciones económicas de su sostenibilidad respecto al ingreso de recursos públicos.
Del mismo modo, brindará un diagnóstico sobre el manejo actual del espacio con el objetivo de verificar si los lineamientos internos mantienen su eficacia ante el contexto actual.
Posteriormente, se iniciará un proceso de socialización con la población aledaña al espacio con el cual se conocerán las opiniones de la ciudadanía acerca del designio. Esta información se tomará en cuenta para generar un anteproyecto afín a los sentires de los lugareños.
Para lograr este último punto será necesario llevar a cabo reuniones y actividades en la comunidad, así como mesas de trabajo, en las cuales el Estado poblano deberá informar a la gente sobre la propuesta, así como las problemáticas que pretende aminorar dicho complejo turístico.
Por su parte, en cuanto al estudio de las condiciones ambientales de la zona, la Smadsot señaló que requerirá que el grupo de expertos sea capaz de elaborar un estudio hídrico, con el objetivo de reconocer el estado que guarda el nivel del agua en esa parte de la cuenca del Río Balsas, que actualmente dota del líquido al estado de Puebla.
Este punto contempla también el estudio sobre la relación económica y social, en su interacción con la preservación ecológica, es decir, evaluará si las ganancias provenientes del aprovechamiento de los recursos naturales son sustentables o no.
Aunado a ello, de manera específica, la autoridad subrayó que deberá elaborarse un dictamen sobre la flora y fauna que persisten en dicha ANP. Esto tendrá la intención de generar una serie de recomendaciones para restituir el balance ecosistémico y evitar posibles daños ambientales con la construcción del complejo turístico.
A propósito, cabe recordar que El Sol de Puebla documentó en marzo pasado que el ajolote poblano afronta el riesgo de desaparecer en la próxima década, esto debido al peligro que le genera subsistir en un contexto adverso en el que el cuidado de la especie no es prioridad para las autoridades federales y estatales.
Finalmente, el documento emitido por la Smadsot señaló que, con base en los resultados obtenidos, el grupo de profesionales elaborará un anteproyecto de infraestructura física para el espacio. Aunque no se especificaron las características del espacio, se detalló que el mismo debe contar con senderos temáticos, zona de pic-nic, foro abierto y zona comercial.