El alcalde de Tecamachalco, Ignacio Mier Bañuelos, se encuentra en la Ciudad de México y no en el municipio que gobierna, esto a pesar de que el Gobierno del Estado no ha asumido la seguridad total y que se sigue investigando a su titular de seguridad, Alejandro Santizo.
“Hasta donde nosotros sabemos y porque estuvimos en comunicación o tratamos de establecer comunicación con el presidente municipal, se encuentra en la Ciudad de México, así nos dijo su particular”, declaró en conferencia de prensa la titular de la Secretaría de Gobernación, Ana Lucía Hill Mayoral.
Por su parte, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta dijo que ante esta situación garantizarán la seguridad pública en Tecamachalco y que nadie va a desplazar a las autoridades de ningún municipio. Desde que ocurrieron los hechos hay 10 patrullas estatales haciendo operativos en toda la demarcación. “Yo he instruido a la Secretaría de Gobernación que tenga diálogo entre gobiernos con el Ayuntamiento y su alcalde, así que todo es un asunto de procedimientos y de diálogo”
Fue el 22 de noviembre cuando el gobernador confirmó que su administración no había asumido la seguridad de Tecamachalco a pesar de que se confirmó el asesinato de tres agentes ministeriales a manos de policías y se inició una investigación en contra del secretario de seguridad pública, Alejandro Santizo y su escolta.
Explicó que esto se debía a que Mier no había solicitado formalmente la petición, sin embargo, Barbosa cree que al pedirlo el presidente municipal también entraría en una práctica “exculpatoria”. Incluso el mandatario dijo que esperaba que el edil no estuviera involucrado en los hechos, pues lo lamentaría mucho.
Hay que recordar que desde que se dio a conocer la muerte de los tres agentes, el edil ha estado en el ojo del huracán, pues su primera y única declaración fue para decir que el asesinato había sido una equivocación, así como falta de coordinación, incluso que los elementos municipales habían actuado en el cumplimiento de su deber.
Pero horas después, tanto el fiscal Gilberto Higuera Bernal como el gobernador, dijeron que los elementos habían sido atacados directamente, inclusive calificaron el hecho como una ejecución. En suma, que Alejandro Santizo, estuvo involucrado directamente en el ataque.
En otros temas, el gobernador informó que Elsa Bracamonte, titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte sigue haciendo una revisión de todas las irregularidades que se cometieron en dicha dependencia, pero antes de su llegada. Asimismo, confirmó que dicha dependencia sí planea crear una plataforma para evitar asaltos a las unidades del transporte público, pero aún no se ha concretado.
“Las cosas que no se resolvieron bien fue el tema de una plataforma para que todos los transportistas tuvieran cámaras y botones del pánico, para que se constituyera como una obligación luego del aumento de tarifa y que estuviera conectado al C5, pero está en proceso, se está consolidando porque técnicamente no es fácil de resolver, tiene complicaciones. Se hará una licitación pública y se van a dar a conocer toda la adquisición tecnológica por parte de transportistas, así es que va avanzando”, aseguró.
En otro orden de ideas, nuevamente opinó acerca de la toma en la empresa de Bonafont, pero en esta ocasión dijo que estas acciones ahuyentan inversiones en dicha zona que es de mucho desarrollo por estar cerca del aeropuerto. “No es la mejor forma de presentación”. Agregó que el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Juan C. Bonilla mantienen una relación institucional, pero dicha relación no tiene como fin ordenar detenciones en contra de los activistas para terminar con la toma.
Al preguntarle acerca de su reunión con el embajador de la Unión Europea, Gautier Mignot, dijo que abordaron muchos temas principalmente los de cambio climático y cuestiones de democracia, incluso que pusieron en análisis el rescate del río Atoyac.
Para finalizar, aprovechó para mencionar que no cree que se pueda llevar a cabo para este año una reunión con los alcaldes de la zona limítrofe de Puebla, pero para el 2022 ya “están apalabrados” con el gobierno de Tlaxcala.
