En peligro, magia cultural de la Gran Pirámide de Cholula

Eventos masivos, proliferación de ambulantes, síntomas de gentrificación y afluencia desbordada de turistas podrían atentar contra la Gran Pirámide

Norma Marcial / El Sol de Puebla

  · lunes 2 de diciembre de 2024

La piratería ha desplazado a los artesanos en la zona de Gran Pirámide de Cholula. Foto: Daniel Casas / El Sol de Puebla

La magia cultural de la Gran Pirámide de Cholula está en riesgo por el comercio informal, el crecimiento urbano desordenado y los eventos masivos que atentan contra su vocación histórica y patrimonial.

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Este montículo arqueológico, junto con el sitio prehispánico al que pertenece, enfrenta desafíos. Su perímetro lucha contra una cerca de vendedores populares y fijos que, en lugar de disminuir, aumenta. Su reglamentación es transgredida por inversionistas y pobladores que insisten en edificar donde no es permitido. Su basamento es lentamente afectado con acústicas altas y detonaciones de bombas pirotécnicas de las fiestas religiosas, ferias temáticas y eventos masivos celebrados a lo largo del año en sus alrededores.

La Gran Pirámide, que en tiempos prehispánicos era nombrada como cerro del Tlachihualtépetl (en náhuatl significa cerro hecho a mano) forma parte de una zona monumental de 154 hectáreas, según la declaratoria hecha por autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en diciembre de 1993, la cual integra territorios de San Andrés y San Pedro Cholula, municipios hermanos.

Puestos comerciales y construcciones comienzan a proliferar en la zona monumental de Cholula. Foto: Norma Marcial / El Sol de Puebla

Sin embargo, de ese polígono protegido, el área medular del complejo arqueológico es de apenas 14 hectáreas, por lo que, en el resto, hay asentamientos habitacionales y comerciales de las cabeceras locales de las Cholulas, que, desde la época de la Colonia, arrastran conflictos por los límites territoriales, en especial aquel donde está el Tlachihualtépetl, con el basamento más grande del mundo al medir 450 metros por lado.

Este escenario desprende opiniones de especialistas, autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de los ayuntamientos de San Andrés y San Pedro Cholula que, desde sus perspectivas, admiten la existencia de problemáticas en torno a este gran atractivo de Puebla, que en octubre del 2012 unió en papel, pero no en operatividad, a los municipios referidos para darles el nombramiento de Pueblo Mágico en México.

Decenas de minilocales invaden la periferia de la Gran Pirámide de Cholula. Foto: Daniel Casas / El Sol de Puebla

Hay actividades que no tienen nada que ver con la vocación histórica y patrimonial de la Gran Pirámide, porque deterioran la imagen y debilitan los usos tradicionales de los pueblos originarios de San Andrés y San Pedro Cholula y ponen en riesgo la magia del Pueblo Mágico de Cholula

señala José Álvaro Hernández Flores, profesor investigador del Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales del Colegio de México, en torno a la saturación de eventos masivos, nada culturales, que se realizan en los dos parques públicos que rodean el montículo: Parque Intermunicipal del lado de San Andrés Cholula y Parque Soria en el suelo de San Pedro Cholula. Asimismo, exhibe la venta de productos hechos en China o India, que no representan la identidad de Cholula.

El antropólogo y administrador del sitio prehispánico de Cholula, Martín Cruz Sánchez, en su intervención, se pronuncia por una dignificación o análisis de la vocación de los espacios públicos que rodean el área monumental, que hoy está cercada de comercio informal, ante un incremento de vendedores.

Considera que los conflictos territoriales entre las Cholulas contribuyen a la inexistencia de acuerdos para atender problemas presentes.

Dolores Dib Álvarez, profesora investigadora de la Facultad de Arquitectura de la UPAEP, recuerda que la zona arqueológica de Cholula tiene restricciones en materia de construcción y son las autoridades municipales quienes deben hacerlas respetar, en coordinación con el INAH.

En tanto, los titulares de la Secretaría de Gobernación de los ayuntamientos de San Andrés y San Pedro Cholula, Jesús Parra y Carlos Carrillo, respectivamente, coinciden en que después del día 15 de octubre, cuando arribaron las nuevas administraciones, se instaló una mesa de diálogo en la Dirección General de Gobierno, a fin de atender las problemáticas presentes con los límites territoriales y el comercio informal en la zona. No obstante, ambos funcionarios dejan entrever diferencias en el manejo de acciones en este punto turístico, al anteponer la autonomía de sus territorios y no el trabajo en equipo obligado por la categoría de Pueblo Mágico.

Ya se puede visitar la zona arqueológica de Cholula los domingos. Foto: Norma Marcial / El Sol de Puebla

Cambios en la zona arqueológica de Cholula

José Álvaro Hernández Flores, profesor investigador del Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales del Colegio de México, habla de un deterioro en el basamento de la Gran Pirámide, que, a su decir, es por el tipo de actividades que se desarrollan en sus alrededores, las cuales no tiene absolutamente nada que ver con la vocación histórica y patrimonial de la misma.

Sostiene que los eventos masivos, tanto de lado de San Andrés como de San Pedro, específicamente en los parques Intermunicipal y Soria, están contribuyendo a deteriorar la imagen cultural y debilitan los usos tradicionales de estos pueblos ceremoniales y religiosos.

Además, se pierde la magia que llevó a las Cholulas a ser Pueblo Mágico, lo que es sumamente riesgo porque pone en riesgo el patrimonio cultural. Como tal

este tipo de actividades tienen una tendencia a promover el uso del patrimonio histórico con fines turísticos y comerciales, y en este caso, esto no es compatible con la historia de la pirámide

Advierte que, de continuar este escenario, se alimentarán los procesos turísticos, el crecimiento urbano desordenado y las intervenciones urbanísticas que corresponden a las necesidades de actores externos, porque tienden a homogeneizarse y con eso se pierde la identidad, para dar paso a la gentrificación.

Cholula recibe a una gran cantidad de turistas extranjeros. Foto: Daniel Casas / El Sol de Puebla


Los alrededores de la Gran Pirámide reportan gentrificación comercial

Ya hay un ejemplo de gentrificación comercial, continúa el investigador del Colegio de México, el cual sucedió en el Parque Soria, de San Pedro, donde en el pasado se desplazó a los comerciantes tradicionales del área de las vías del tren y donde hoy se encuentra un montón de tiendas con artículos chinos o de India, es decir mercancías o productos que no tienen nada que ver con lo que es Cholula, su identidad y producción artística y tradicional.

Puntualiza que San Andrés y San Pedro Cholula, desde la década de los 70 del siglo pasado, experimentan cambios por procesos de urbanización. El primero fue el trazo de la vialidad estatal Recta Cholula-Puebla, que trajo consigo la industrialización y un crecimiento habitacional mayor, así como industrial. El segundo se dio antes del cambio de milenio con la creación de la zona de Angelópolis, donde mil hectáreas ejidales fueron expropiadas para privatizarlas y ahora tienen el costo por metro cuadrado más caro en la entidad. El tercero fue en el 2012, cuando el ex gobernador Rafael Moreno Valle logró el nombramiento de Pueblo Mágico para las Cholulas, que desencadenó una explosión del crecimiento urbano y demográfico, pero también una especulación inmobiliaria.

Una solución que plantea es dar importancia a la planeación urbana y que las autoridades, junto con los pueblos originarios y mayordomos, trabajen de forma consensuada para cuidar la zona arqueológica-monumental.

A pesar de la caída de la estructura no se reportaron personas lesionadas. Foto: Cuartoscuro.com

Comercio informal

Martín Cruz Sánchez, antropólogo y administrador de la zona arqueológica, dice que hoy la normatividad que regula la declaratoria federal de Cholula Pueblo Mágico, creada en 2012, no se cumple, porque hay áreas donde el comercio informal no debería operar, pero está presente.

Expone que antes del nombramiento gubernamental, el andador de la vía del ferrocarril albergaba a los viejos comerciantes, lo mismo sucedía en las escalinatas de la Gran Pirámide que conducían al Santuario de la Virgen de los Remedios, cuyo centro de oración está en la cúspide, pero fueron reubicados por el gobierno del ex mandatario Rafael Moreno Valle, a puntos de comercio establecido.

En ese momento se estableció que cinco áreas estarían libres de esta actividad: avenida 14 Poniente o Morelos, andador de las vías ferroviarias, pasillo del Museo Regional y la pirámide, las escalinatas y la zona sur. Hoy, hay un gran incremento de comerciantes ambulantes, debido a múltiples factores, que van desde el cierre de calles aledañas, los viejos conflictos por los límites territoriales municipales y la falta de acuerdos, hasta el cambio de trienio.

Desde su oficina, el responsable del sitio milenario, que de enero a septiembre ha recibido 95 mil 276 visitantes según la página del INAH, propone que se dignifique la vocación de los espacios públicos, sobre todo del conjunto patrimonial del Santuario de la Virgen de los Remedios y la Gran Pirámide, porque genera un conflicto fuerte las actividades del Parque Intermunicipal, de San Andrés, y del Parque Soria en San Pedro Cholula -aunque en el primero es menor, por su lejanía al basamento-, que son las ferias temáticas ya que invaden con comercio los accesos y andadores externos.

San Andrés Cholula, a partir del 2016 inició con la programación de eventos masivos, no así San Pedro, ya que el Parque Soria tiene más años de operación, relata.

“Ambos espacios (parques) están dentro del polígono declarado como zona de monumentos arqueológicos de Cholula y en ese sentido tenemos una afectación constante por las actividades que se llevan a cabo, son eventos no tan constantes, pero sí se realizan, porque tenemos una presencia fuerte de comercio informal y en ese sentido se violenta la reglamentación de Cholula Pueblo Mágico porque no se contribuye a una mejor imagen del sitio, aunque a muchos visitantes sí les gusta que haya presencia del comercio informal y eso también se respeta”, opina.

Las áreas sin construcción en Cholula son atractivos de empresas. Foto: Bibiana Díaz / El Sol de Puebla

Construcciones irregulares

Otro problema que aborda es el registro de obras irregulares. El sector sur de la zona arqueológica es el que tiene más presión de este tipo, porque aún tiene áreas agrícolas y eso es atractivo para inversionistas y pobladores.

Sí tenemos situaciones de obras irregulares en los sectores que no tenían construcciones después del decreto del 93 y eso tiene que ver con una problemática complicada, porque son obras de las que los técnicos del INAH, muchas veces saben que se inician los fines de semana o se construyen rápidamente, como son ampliaciones de vivienda, presencia de nuevos negocios, construcción de terrazas y uso de azoteas que no son obras largas, pero sí rápidas añade.

Hay falta de coordinación entre las autoridades municipales, que en principio son las responsables de ver ese tipo de obras con el INAH, porque si no hay un freno de los trabajos y si tampoco los reportan con oportunidad, el problema toma otras dimensiones para el INAH.

Afirma que, si no hay atención a ésta y otras situaciones habrá escenarios graves, porque hoy se trabaja para posicionar a Cholula como el principal Pueblo Mágico del estado de Puebla, pero se debe trabajar en más que eso.

“Se tendría que cambiar no solo el discurso de la importancia del turismo y de la derrama económica producto del turismo, sino éste tendría que estar acompañado de acciones por parte de las instancias competentes, por ejemplo en el comercio informal en la vía pública los ayuntamientos tendrían que intervenir, independientemente de los conflictos territoriales, que más que ayudar, contribuyen a la problemática porque no se ponen de acuerdo y pues finalmente el visitante no sabe si está en San Pedro o San Andrés. Lo que debe hacer son proyectos integrales que no solo sean del lado de San Pedro o de San Andrés, sino que impliquen la zona arqueológica, el santuario y demás atractivos”, agrega.

El antropólogo repite que una solución es establecer los lugares donde sí se pueda ejercer el comercio y que quede reglamentado, pero que dicha normativa se aplique y respete porque la existente es de papel. Comparte la idea de que todo mundo tiene derecho a trabajar, pero en este caso debe existir reglamentación, de lo contrario, todo se convierte en tierra de nadie.

De 35, es el número de leyendas documentadas en San Andrés Cholula. Foto: Erik Guzmán / El Sol de Puebla

Concluye al decir que se requiere decisión política de los dos Ayuntamientos involucrados para ordenar el tema del comercio informal, pero “si hay que entrarle de manera firme a una problemática que se puede convertir más grave de lo que vemos presente y en el caso de la zona arqueológica hoy está limpia de vendedores en su interior, hecho que no pasa en otros sitios del país”.

Autos invaden las calles de Cholula. Foto: Bibiana Díaz / El Sol de Puebla


Ayuntamientos tienen responsabilidad

La doctora Dolores Dib Álvarez, profesora investigadora de la Facultad de Arquitectura de la UPAEP, asegura que no se puede construir en los límites de la zona arqueológica de Cholula y es una responsabilidad de las autoridades, tanto de los ayuntamientos como del INAH, regular cualquier intervención.

A su consideración, la Gran Pirámide de Cholula y la zona monumental de la que forma parte, tiene mantenimiento constante que es obligado por las inclemencias del tiempo, el propio asentamiento del montículo y por la visita masiva de personas.

No obstante, debe cuidarse que la zona protegida sufra alteraciones y que las construcciones o el comercio no sobrepasen los límites de protección de la propia pirámide.

“Está la Ley Federal de Sitios y Monumentos del INAH que protege estas zonas, pero las autoridades municipales son las que tienen que autorizar y vigilar, pero sobre todo evitar que el turismo en masivo no afecte el inmueble arqueológico”, finaliza.

Apertura de calle, posible solución

Carlos Carrillo, secretario de Gobernación de San Pedro Cholula, informa que mantiene mesas de trabajo con autoridades del municipio vecino y del gobierno del estado para ver la normativa del comercio, los límites territoriales y otras dinámicas por emprender en los alrededores de la zona arqueológica.

Acepta que, al cambio de trienio, después del día 15 de octubre, la afluencia de vendedores se desbordó, pero actualmente este municipio tiene censos de todos los comerciantes, tanto fijos, semifijos y populares (ambulantes), que suman un total de 147 en ese punto.

Anuncia que la política del gobierno cholulteca es que el comercio popular no debe crecer y por eso hay control del lado del territorio. Se trabaja para que el padrón no incremente y haya organización.

“No los vamos a agredir o retirar porque la política de los gobiernos de la cuarta transformación (al que pertenece San Pedro Cholula tras el arribo de Tonantzin Fernández a la alcaldía) es ser incluyentes y por eso se verá la manera de integrarlos y volverlos formales, a través de la creación de cooperativas o de agrupaciones”, indica.

Eventos masivos, ambulantes y afluencia desbordada de turistas atentan la Gran Pirámide. Foto: Daniel Casas / El Sol de Puebla

Cuestionado sobre una posible solución para normar el comercio informal que se hace presente en eventos masivos o fines de semana en los alrededores de la pirámide, resalta que se trabaja para lograr que la calle Morelos, que es el límite territorial con San Andrés, porque es compartido su trazo, se reabra a la circulación de lado sanandreseño, ya que la peatonalizan los fines de semana. Eso contribuiría al flujo de vehículos y entonces los vendedores no tendrían espacios para instalarse.

Operativos de control

Por su parte, el secretario de Gobernación de San Andrés Cholula, Jesús Parra, reveló que, ante el aumento de vendedores informales en el polígono monumental, la comuna realiza operativos de normatividad para evitar el uso de la vía pública con este fin. Aunque ha dejado entrever que el tema y las acciones se dialogan en el gobierno del estado a fin de generar una sinergia en la materia, pues admite que las confusiones con los límites territoriales son aprovechadas por el gremio de comerciantes.

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