Tres de cada 10 personas que laboraron en alguna actividad productiva en el estado durante el último trimestre de 2017, no recibieron pago o percibieron menos de un salario mínimo al día, informó la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).

Entre octubre y diciembre del año pasado 346 mil 54 ciudadanos, que representan el 12.4 por ciento de la población ocupada, no recibieron ingresos por su labor, a pesar de que formaron parte de la fuerza productiva en alguna empresa u organismo.

Mientras tanto, el 17.9 por ciento del total de los ocupados percibió menos de un salario mínimo (498 mil 914), es decir, que tuvo ingresos diarios menores a 80.04 pesos, por lo que al mes sobrevivió con un ingreso menor a los 2 mil 400 pesos.

En el estado, 2 millones 780 mil 674 personas se encuentran dentro de la población ocupada, pero 844 mil 968 no recibió pago por su trabajo o ganó menos de un salario mínimo, cifra que representa el 30.3 por ciento del total en el estado que se encontró realizando alguna actividad productiva.

El resto de la población trabajadora, indican los datos de la Secretaría, percibió de uno a más de 10 sueldos mínimos.

Del total de los trabajadores en Puebla, una mayor cantidad percibe sueldos de uno a dos mínimos al día, es decir, que al cierre del año pasado, 974 mil 926 personas percibieron entre 80.04 a 160.08 pesos, o de 2 mil 401.2 pesos a 4 mil 802.4 pesos mensuales. Esta parte de la población representa el 35 por ciento de los ocupados el estado.

Las cifras definitivas de la Secretaría añaden que, a nivel nacional, una mayor cantidad de trabajadores gana de dos a cinco salarios mínimos, ya que sumaron en el último trimestre del año 17 millones 227 mil 577 personas, cifra que representa al 32.5 por ciento de los ocupados en México.

En el país, 52 millones 865 mil 845 ciudadanos se encontraron laborando en alguna actividad productiva en el país.

En el estado de Puebla, los servicios no especificados concentraron al 26 por ciento de los trabajadores, mientras que las actividades productivas representaron el 23 por ciento, siguieron la industria manufacturera con el 19 por ciento, mientras que con el 17 por ciento estuvo el comercio, con el 8.0 por ciento la construcción, con el 4.0 por ciento transportes y comunicaciones, con el 3.0 por ciento el gobierno y organismos internacionales y con el 1.0 por ciento la industria extractiva y la electricidad.