En el Centro Integral de Servicios (CIS) autoridades estatales y federales encabezaron un simulacro de un sismo de 7.2 grados con epicentro en el municipio poblano de Acatlán de Osorio a un año del terremoto que impactó nueve estados del país y que en Puebla dejó un saldo de 47 muertos.
“Puebla siempre ha estado de pie, nunca se ha doblado”, sostuvo el gobernador, Antonio Gali Fayad, al presidir este ejercicio, en el que participaron 3 mil 847 servidores públicos y ciudadanos que acudieron a realizar algún trámite a estas oficinas gubernamentales, las cuales se encuentran en la zona de Angelópolis.
Mientras el viento ondeaba la bandera de México ubicada en la explanada del CIS, decenas de personas descendían sin orden de los tres edificios que lo integran en tanto llegaban las ambulancias y bomberos que se encontraban cerca del lugar.
Como ya estaba programado el ejercicio, que fue antecedido por un minuto de silencio que se guardó por las víctimas del terremoto, los participantes se notaron tranquilos, incluso se pudo observar que algunos bajaron de sus oficinas con algunos minutos de anticipación.
Al término del simulacro de sismo, que supuestamente tuvo una duración de 60 segundos y que inició a las 13:16 horas en punto, los secretarios estatales, delegados federales, servidores públicos, ciudadanos e incluso medios de comunicación levantaron el puño como signo de unidad de todos los poblanos.
Participaron 13 elementos de Protección Civil, una unidad de rescate urbano, cinco binomios caninos, 18 paramédicos de SUMA y de Cruz Roja, una unidad de incidentes masivos, tres ambulancias, una unidad de desastres, un helicóptero, brigadas internas del CIS y se tuvieron cinco “lesionados”, uno de ellos -que era un muñeco- supuestamente tuvo que ser descendido desde la azotea del edificio sur.
Tras el simulacro nacional el gobernador dijo que se recuerda con tristeza y dolor el sismo de 1985, el de 1999 y el que sacudió a la entidad el 19 de septiembre de 2017; no obstante, refirió que Puebla está de pie y afirmó que su sociedad está preparada para enfrentar fenómenos de esta naturaleza y otros que también se pueden presentar en el estado, como los huracanes.