Once años pasaron para que Servando Enrique estuvieratotalmente convencido de que está curado de la leucemia aguda conla que lo diagnosticaron cuando apenas tenía dos años de edad, yluego, recibir un trasplante de células madre de un donadoranónimo que hizo su aportación en el Hospital General CentroMédico Nacional La Raza del Instituto Mexicano del Seguro Social(IMSS).
Fue en el Centro Médico de Especialidades “San José” delIMSS, donde llevaron a cabo el procedimiento quirúrgico, donde, demanera mensual, hay entre 20 y 30 niños con este tipo deenfermedades en espera de una donación y cada 10 días, enpromedio, se realiza un trasplante de este tipo.
Ayer, en rueda de prensa, junto con sus padres y el jefe dehematología de San José, Alejandro Limón Flores, el adolescentede 14 años de edad se expresó nervioso y dijo no recordar nadapor lo que pasó durante los tratamientos de quimioterapia y muchomenos la cirugía, pero aseguró que se siente completamente sano ylibre de todo tipo de síntomas.
Y es justo así como sucede, explicó su médico, quien le dioseguimiento desde el primer día que llegó al nosocomio, segúnsus padres, aquejado por fuertes dolores en las piernas y undiagnóstico de leucemia aguda, pero ahora está completamentesano. A los dos años de edad fue diagnosticado, pero inició untratamiento en el que confiaron le quitaría todos los problemas,hasta que tuvo una recaída.
Los primeros días, relató la madre, Obdulia Pérez, pensaronque podrían solventar los gastos de atención, fuera de lainstitución pública, pero al cabo de un mes ya habían hecho ungasto por más de 150 mil pesos, de tal manera que decidieron dejartodo en manos de los médicos del IMSS.
Ahí lo evaluaron y decidieron que era necesario trasplantarlecélulas madre y aunque una de sus hermanas era cien por cientocompatible para el procedimiento, antes hallaron un cordónumbilical del cual era factible extraer la sangre para ponérsela aServando.
El día de la cirugía por fin llegó y, en la memoria de lospadres aún está fresco, pero ya pasaron 11 años sin que eladolescente tenga problemas de salud, de ahí la importancia deeste caso de éxito, porque Servando, ayer enfundado en unachamarra negra, está curado al cien por ciento y lleva un estilode vida normal.
Por su parte el especialista en hematología señaló que ladonación del cordón umbilical, donde se encuentran las célulasmadre, es de vital importancia para las instituciones médicas; sinembargo, no existe la cultura de la procuración de dichotejido.
Es más, estimó que de cada mil partos entre una y dos madresdeciden donar el cordón umbilical, pero muchas de ellas lo hacenpara uso propio o preventivo ante alguna situación de salud y nopara el banco de células madre.