Izúcar de Matamoros, Pue. María de Jesús Medina Herrera, mejor conocida como ‘La señorita Chuchita’, es una mujer aguerrida que lleva más de 70 años al servicio de la ciudadanía en Izúcar de Matamoros, con un cúmulo de experiencias sumada al trabajo y es una de las mujeres de mayor edad actualmente activas dentro del gobierno municipal.
Sentada junto a un escritorio en el interior de Casa Colorada, es la encargada de la expedición de la Cartilla de Identidad del Servicio Militar.
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En entrevista para El Sol de Puebla, en el marco del Día Internacional de la Mujer, Chuchita poco a poco contó su historia, pues al principio mostró resistencia, toda vez que su rectitud y carácter mantiene respeto a su trabajo, pero finalmente cedió.
Ella empezó a trabajar desde muy joven entregando oficios a las diferentes estancias dentro del gobierno municipal y con el paso de los años tomó forma su oficio; de secretaria de los presidentes municipales pasó al cargo que actualmente ocupa, la expedición de la cartilla militar a jóvenes.
Aceptó ser de un carácter forjado heredado por sus padres, lo que ha incomodado a jóvenes, adultos y hasta a los militares cuando acude a entregar sus documentos a la 25 Zona Militar en la Ciudad de Puebla, aunque siempre es un ejemplo al presentar sus libros en orden y en ocasiones al utilizar su máquina de escribir.
María de Jesús es originaria de este municipio mixteco, sus padres fueron trabajadores del famoso trapiche que se encontraba en la junta auxiliar de La Galarza; tuvo 12 hermanos y ella fue la tercera. Desde niña ha vivido en calles céntricas de la ciudad de Izúcar hasta la actualidad.
“Mis padres siempre fueron de respeto, con carácter de supervivencia, no me dejaron herencia material pero sí el trabajo constante de todos los días y a no abandonar mi trabajo y servir a los jóvenes”, señaló.
A sus 86 años ella no desea pensionarse o dejar su trabajo, pues refiere tener miedo de no ser útil, además de enfermarse y morir pronto, por lo que mejor decide pararse temprano y continuar con sus actividades diarias.
Durante su trabajo de siete décadas, en el municipio han pasado más de una veintena de alcaldes, quienes la admiran por la agilidad en su trabajo, esfuerzo y la experiencia que día a día adquiere a través de los años, así como del cálido recibimiento de sus compañeros en la junta municipal de reclutamiento.
Sobre el amor, ‘La Señorita Chuchita’ confiesa que se encuentra decepcionada, pues cuando joven conoció al que sería el amor de su vida. Era su vecino. Ambos eran jóvenes con muchos proyectos y metas en la vida, no estaban casados, pero sí llegaron a estar comprometidos, pero en un episodio desafortunado descubrió a su novio con una chica y desde ese momento decidió no volver a enamorarse.
Después de esa decepción amorosa, nunca se casó y ha dedicado toda su vida a trabajar, y de aquellos hermanos y familiares que siempre están para apoyarla y nunca la dejan sola. “Estaré hasta donde Dios me permita, gracias a él acá sigo”, confió.