Los trabajadores fueron marcados con una playera del grupo político en el poder para saber por quién votarían en la elección sindical de la Sección 39 de Petróleos Mexicanos (Pemex) con sede en Huachinango, acusó Abraham Ramírez Hernández, integrante de la oposición, al lamentar la imposición de Carlos Soto Islas como secretario general.
En evento encabezado por María de Lourdes Díaz Cruz, lideresa del Movimiento Nacional de Transformación Petrolera, el opositor refirió que se les hizo creer a los trabajadores que podrían saber el número de ficha y por quién votarían, además de que se les corrió el rumor de que habría una cámara oculta sobre la mampara de votación e incluso algunos integrantes de la planilla oficial llamaron al voto el día de los comicios, cuando esto estaría prohibido.
Carlos Soto Islas ganó con el 75 por ciento de la votación, con una lista nominal de 648 trabajadores, en la que hubo una participación del 97 por ciento.
Al mismo tiempo, Luis Enrique del Ángel, integrante de la oposición de la Sección 30 con sede en Poza Rica, Veracruz, indicó que se repitieron las prácticas que en Huauchinango se suscitaron, es decir, mediante amenazas intimidaron a los trabajadores, logrando que no votaran libremente.
Daniel Sosa, de la Sección 46, con sede en San Martín Texmelucan, refirió que los trabajadores constantemente son hostigados en sus centros de trabajo.
En el caso del sureste, en Ciudad del Carmen, Campeche, en las secciones 42 y 47, donde la mayor parte de los centros de trabajo está en plataformas, “las violaciones a los estatutos estuvieron a la orden, pues hubo hasta acarreados, a los que se les pagó 200 pesos por persona, se les puso la famosa playera y entraron a la votación, yendo contra el reglamento, es decir, personas que no son trabajadores de Pemex votaron”, compartió Ricardo Navarro Barrios.