Manuel Gaspar Rodríguez, activista de Cuetzalan, pudo haber sido asesinado por su oposición a proyectos de explotación de recursos naturales en la Sierra Norte, acusaron Violeta Valdez, representante del Centro de Derechos Humanos “Antonio Esteban”, y Alfredo Guerrero, miembro del Movimiento Independiente Obrero, Campesino Urbano y Popular de la Coordinadora Plan de Ayala (MIOCUP-CNPA).

A decir de ambos, el homicidio ocurrido la madrugada del pasado lunes en un hotel del municipio de Cuetzalan y que es investigado por la Fiscalía General del Estado (FGE) como un crimen pasional puede ser más bien un atentado político, pues Gaspar Rodríguez recibió llamadas de hostigamiento, intimidaciones y amenazas desde el 5 de junio de 2014.

Y es que agregaron, él era un activo opositor a los llamados “proyectos de muerte”, es decir, a la instalación de compañías que explotan los recursos naturales de la región poniendo en riesgo la salud y bienestar de sus comunidades, entre ellos los del grupo minero “El Aretón” y la privatización del agua.

Inclusive, explicaron, las advertencias en contra de Manuel Gaspar iniciaron justo al día siguiente del homicidio de otro activista como él, Antonio Esteban Cruz, el 4 de junio de 2014.

Por esta razón, exigieron en rueda de prensa a la FGE, al Gobierno del Estado y al gobierno federal considerar su activismo en la línea de investigación y dar con los responsables.

“La FGE debe tomar en cuenta el contexto nacional que existe de criminalización, hostigamiento a defensores de derechos humanos”, sentenció Violeta Valdez, y “lo consideramos un asesinato político por las condiciones, por las características en que se dio y por la manera en que surgió, porque venimos denunciando que existía hostigamiento, persecución”, completó Alfredo Guerrero.

Para finalizar, añadieron que preparan manifestaciones para demandar al gobierno estatal y federal el esclarecimiento de los hechos.

INVESTIGAN CRIMEN PASIONAL

A más de 24 horas del crimen, extraoficialmente, se sabe que la Fiscalía General del Estado (FGE) presume motivos personales en la línea de un crimen pasional, lo que, según las fuentes consultadas, sería una falta grave de esta institución, en un intento de suavizar la magnitud de este asesinato.

"La intención es desviar la atención de nuestra existencia de que se agoten todas las líneas de investigación y ceder realidad al contexto de hostigamiento que a nivel nacional y estatal se han dado contra los activistas en Cuetzalan", acusó un miembro del MIOCUP.

Las fuentes consultadas criticaron que la noticia se dio a conocer primero a medios locales, incluyendo las fotos sangrientas, mucho antes de notificar a la familia y les resulta extraño que hasta altas horas de este lunes los familiares tuvieron conocimiento del caso.

Las reacciones de este movimiento – competencia nacional– no se han hecho esperar y varias organizaciones han condenado este crimen ocurrido tres semanas antes del cuarto aniversario del asesinato del también activista cuetzalteco Antonio Esteban Cruz.

Otra fuente consultada señaló que las líneas de investigación no deben reducirse a la versión de rencillas personales y deben orientarse la identificación de quienes tienen fuertes intereses económicos en el avance de los proyectos extractivos.

Condenan asesinato de Manuel Gaspar Rodríguez

Integrantes del Movimiento Independiente Obrero, Campesino Urbano y Popular integrante de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala, Movimiento Nacional (MIOCUP - CNPA MN), y la Comisión de Desarrollo Sustentable del Centro de Derechos Humanos Antonio Esteban A.C (CDHAE), condenaron el asesinato del activista.

Exigieron una investigación seria, eficaz e imparcial, acorde con el derecho de las víctimas, a fin de conocer la verdad y obtener justicia, puntualizando “el fiscal tiene la obligación de agotar todas las líneas de investigación para esclarecer los hechos”.

El cuerpo fue encontrado dentro del cuarto marcado con el número 17, del motel Quetzal, ubicado a un costado del Centro de Convenciones del municipio serrano, donde al parecer fue atacado con un arma blanca. Fue la encargada del hotel, quien alrededor de las 7 de la mañana, al notar manchas de sangre en la escalera, decidió entrar percatándose de la escena del crimen.