Un amoroso abuelo, padre de familia y esposo, así describe Leonor a su esposo Ángel Hernández, quien el pasado viernes cayó a una barranca y hasta el momento se encuentra desaparecido.
Ángel, un hombre trabajador que era el único sustento de su familia, se trasladaba todas las mañanas con su bicicleta desde su domicilio en la 4 poniente número 15 de san Mateo Mendizabal, hasta La Gran Bodega donde trabajaba como acomodador de autos.
Su ruta era la misma, siempre: tomaba la orilla de la carretera Puebla - Amozoc y se incorporaba hacia la calle 3 poniente por el acceso hacia el mercado para tomar la entrada trasera del establecimiento y de la misma forma en su hora de salida.
El día viernes 7 de mayo, una fuerte lluvia de más de tres horas había azotado al municipio. Cerca de las 3:00 de la tarde, Ángel tomó su impermeable amarillo, montó su bicicleta y se dirigió a casa, sin pensar que la calle por la que siempre tomaba, estaba completamente inundada y que, al llegar a la barranca de Santiaguito, la corriente lo arrastraría para perderse entre el agua.