Las visitas a las bibliotecas públicas para consultar información bajaron hasta un 60 por ciento en los últimos 10 años en las regiones de Acatzingo y San José Chiapa, estimaron los bibliotecarios, pues ahora los estudiantes prefieren obtener información con sólo dar un click en la computadora.
En un recorrido de El Sol de Puebla se pudo observar que atrás quedaron los días en que las bibliotecas lucían saturadas por los estudiantes, que pasaban horas buscando información para cumplir con sus trabajos o tareas escolares.
Sobre el tema, los encargados de los espacios públicos señalaron: “A pesar que las bibliotecas cuentan con un amplio material entre libros, mapas y revistas, en esta era digital los jóvenes prefieren la comodidad de buscar en Internet, aunque las fuentes no son confiables”.
Y es que el pedir un libro prestado a la biblioteca y regresarlo en la fecha estipulada es algo que los niños y jóvenes ya no suelen hacer, “Los préstamos de libros a domicilio disminuyeron hasta un 70 por ciento”, advirtieron los responsables de las bibliotecas.
Detallaron que las bibliotecas públicas resultaron afectadas por la pandemia del Covid-19 al cerrar sus puertas, y ahora pese a las medidas sanitarias implementadas, son pocos los niños y jóvenes que acuden a realizar tareas o consultas.
Comunicaron que los visitantes que acuden a la biblioteca son generalmente niños y jóvenes en edad escolar, no obstante, afirmaron que no es la misma afluencia que hace 10 años, por lo que se encuentran buscando alternativas para generar interés entre la población.
Destacaron que hoy en día las bibliotecas no sirven únicamente al propósito de prestar libros, se han vuelto espacios de desarrollo integral y aprendizaje alternativo.
SE ALÍAN CON LA TECNOLOGÍA
Los encargados se mostraron optimistas ya que, pese a la aparición de los libros electrónicos, redes sociales y diferentes plataformas, las visitas a la biblioteca no han terminado del todo y coincidieron en que estos recintos deben servirse de las nuevas herramientas para difundir sus acervos y despertar el interés de los visitantes.
“Promover la cultura con la lectura es un trabajo que se fortalece con la tecnología, no acaban las bibliotecas, se están fortaleciendo”, afirmaron.
Finalmente, comentaron que acceder a un libro es muy sencillo, por lo que añadieron: “Basta con visitar una biblioteca y consultar al bibliotecario sobre la temática de interés, y si la idea es leer en casa, solo se necesita un carnet que acredita al lector como afiliado al centro de lectura”, concluyeron.
Cabe mencionar que las bibliotecas públicas tienen como objetivo promover la cultura y la educación, sin embargo, ya sea por falta de presupuesto o poco interés de las autoridades municipales, algunos de estos centros de cultura también tienen serias deficiencias como la falta de mantenimiento de los inmuebles.