Autoridades municipales desplegaron un fuerte dispositivo de seguridad en las inmediaciones del mercado La Purísima en Tehuacán, con el fin de que comerciantes foráneos no se establecieran durante este pasado fin de semana; en respuesta a este tipo de prohibición, comerciantes de la Sierra negra, reclamaron el por qué no les permitían vender, ya que no tienen dinero para poder alimentar a sus familias.
Desde el sábado por la mañana, patrullas de transito y de seguridad pública bloquearon los accesos a este mercado desde cuadras antes, evitando así la llegada de camionetas con mercancía, mientras que ya en el lugar, personal del área de Salud y de Fomento Comercial, hacia un recorrido en la zona, invitando a los pocos comerciantes que estaban colocados a que se retiraran.
De la misma manera se les hizo la invitación a los comercios establecidos, ya que también trataban de vender sus productos de manera normal, por lo que se les pidió que los despachadores contaran con cubrebocas, que tuvieran gel antibacterial, así como la de aplicar la sana distancia, ya que de lo contrario también les pedirían que bajaran sus cortinas.
Por algunos momentos, las discusiones subieron de tono al reclamarles que, si no los dejaban vender, que les dieran un apoyo a quienes tienen esa necesidad de arriesgarse a vender sus productos, pues señalaron que son de escasos recursos y que ninguno tiene ahorros que les permita encerrarse por semanas sin hacer nada.
A estos reclamos se les unió un grupo de mujeres originarias de varias partes de la Sierra Negra, mujeres que dijeron ser madres solteras y que desde hace varias semanas señalan que les han cerrado los mercados de la región, pues solo permiten vender a los comerciantes locales, señalando que son más de 50 comerciantes que están en etas condiciones.
A través de un boletín de prensa, las autoridades señalaron que esta determinación se hace bajo el decreto emitido por el estado, en la que se esta tratando de mantener esta zona comercial, sin mayor presencia de comerciantes y de ciudadanos, sin embargo, la negativa que se ha encontrado en grupos de comerciantes, los lleva a mantener a la policía municipal, en constantes recorridos en la zona.
Cabe mencionar que para los comerciantes la nutrida existencia de la policía local, fue totalmente exagerada, puesto que los comerciantes lo único que pelean es poder vender para alimentarse y aunque no se oponen a tomar las medidas sanitarias, consideraron esta acción como un acto intimidatorio de parte de la autoridad, con tan grande despliegue de fuerzas municipales.