Familiares y amigos acudieron al panteón de Santa María Nepopualco a dejar flores a las tumbas de los peregrinos que perdieron la vida el año pasado en la autopista México-Puebla cuando regresaban de visitar la Basílica de la Virgen de Guadalupe en la Ciudad de México.

Aquel martes 12 de diciembre del 2017 se registró un choque entre camionetas a la altura del municipio de Santa Rita Tlahuapan. Los peregrinos que viajaban en una de estas salieron proyectados.

Al arribar los paramédicos de Caminos y Puentes Federal (Capufe) confirmaron que había varios peregrinos lesionados, por lo cual solicitaron el apoyo de las ambulancias de la ciudad de San Martín Texmelucan.

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En el lugar perdieron la vida ocho personas, aunque la cifra posteriormente se elevó a 11. Sus cuerpos fueron trasladados al anfiteatro de la ciudad de Puebla para luego ser entregados a sus familiares.

A un año de la desgracia, pobladores y familiares pertenecientes al municipio de Huejotzingo llevaron flores a las tumbas de estos peregrinos.

La mañana de ayer los familiares de los fallecidos acudieron a la misa en el templo de Santa María, donde fueron recibidos los peregrinos guadalupanos de este año, que ayer arribaron sanos y salvos a su comunidad y cumplieron de nueva cuenta con la tradición. De allí los deudos salieron con flores en las manos y se dirigieron al panteón.

LOS NOMBRES DE LOS PEREGRINOS

Sergio Guevara, de 13 años; Noé Sánchez, quien cursaba el segundo año de secundaria y tenía 14 años; Geovanny, de 5 años de edad, además de Emilio y Daniel García, de 15 y 14 años de edad, respectivamente.

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Orlando Sánchez, Laura Romero, Maricruz Noriega Sánchez, Isidro García Jiménez, Antonio Sánchez Sánchez y Agustín García Mora. Cabe destacar que a pesar de que llegaron con vida al hospital murieron a los pocos días.