Cuautempan, Pue. Emocionalmente la población ya cayó en "psicosis", nuestro municipio era un pueblo muy tranquilo y tras el asesinato de Hermelinda y Josefina se convirtió en un tema de desconfianza para las mujeres, quienes ya dejaron de salir a caminar como solían hacerlo, confiaron habitantes de este municipio, en testimonios que retratan la realidad social que alimentó la manifestación del pasado jueves.
La falta de alumbrado público, incluso en calles cercanas al primer cuadro de la ciudad, calles que necesitan pavimentación para ser transitadas por vehículos, limitadas zonas de acceso a telefonía celular y algunas otras carencias en esta cabecera municipal alimentaron la sensación de inseguridad tras estos dos feminicidios a tal punto que al menos 10 comunidades se organizaron para la manifestación pacífica que se llevó a cabo el pasado jueves.
Según la explicación de los habitantes, ajenos a cualquier bandera política o los intereses de cualquier organización, el pueblo decidió alzar la voz: "todos conocemos aquí, es un lugar tranquilo hasta que ocurrieron este tipo de hechos", dijo una de las fuentes consultadas. El temor de la comunidad se incrementó cuando notaron que había coincidencias en ambos homicidios, empezando porque ambas fueron atacadas, sus cuerpos dejados en una vereda, al parecer ambos ocurrieron en la noche, ocurrieron en lugares de difícil acceso, las mujeres fueron maltratadas y golpeadas, además de presentar huellas de abuso sexual.
"Como ambos casos fueron casi idénticos, se empezó a crear un temor, una psicosis, una alerta que hizo enojar a muchas otras personas; otros están consternados y otras más externaron su confusión y el segundo asesinato fue la gota que derramó el vaso", según la fuente la marcha fue pacífica, sin actos de vandalismo y ajeno a cualquier interés político.
Las fuentes coincidieron en que en la población todavía hay tensión, lo que se suma a la petición de seguridad, la ampliación de la red de alumbrado público, la red de telefonía celular, así como pavimentación en algunas calles de mucho tránsito, lo que incluso dificulta que los taxis puedan prestar su servicio. El próximo martes se espera la respuesta del ayuntamiento.
