Familiares, amigos y funcionarios de diversos ayuntamientos acudieron a darle el último adiós al delegado de la Secretaría General del Gobierno (SGG), Fernando Tinoco, quien fue secuestrado y asesinado por un grupo de delincuentes.
La mañana del lunes, cientos de personas se dieron cita en la parroquia de San Miguel Arcángel, a donde arribaron familiares y amigos para la misa de cuerpo presente del funcionario, quien en la pasada administración municipal fungió como asesor de Seguridad Pública del municipio.
Cabe destacar que el sepelio se realizó en el panteón de El Carmen, sitio al que llegaron cientos de personas que fueron resguardas por policía y tránsito municipal de Huejotzingo.
Familiares y amigos lamentaron que su vida se haya apagado muy pronto, pues tenía muchas metas por alcanzar junto con su familia.
REPROCHAN VIOLENCIA
Habitantes del municipio mostraron su descontento en contra del gobierno municipal que encabeza Angélica Alvarado Juárez, luego de la muerte del funcionario estatal, además de acusar que la autoridad oculta todos los hechos delictivos, principalmente en la comunidad de Santa Ana Xalmimilulco.
José N., vecino del municipio, lamentó que haya tenido que ser un funcionario estatal la víctima, para que hubiera presencia de la Seguridad Pública tanto municipal, estatal y federal en la comunidad, ya que constantemente se registran detonaciones de arma de fuego e incluso secuestros, sin que las autoridades hagan presencia.
Otra vecina recordó incluso que la misma alcaldesa en un evento de entrega de juguetes en el mes de enero, tuvo que retirarse de la comunidad de Santa Ana debido a la presencia de un grupo de encapuchados y armados en la entrada de la población. Por si fuera poco, dijo, intentaron quitarle el celular a un ciudadano que estaba grabando el momento en que huía Angélica Alvarado.
A partir de esa ocasión, se registraron enfrentamientos entre grupos rivales, ejecuciones y secuestros, uno de ellos contra un exdelegado de la Secretaría de Vialidad, sin embargo, ese caso concluyó con su rescate y detención de algunos de los secuestradores.
La molestia en contra de la autoridad municipal, empezó a crecer en los últimos dos meses, pues cuando reportaban detonaciones de arma de fuego en sus calles, el ayuntamiento siempre desmentía los hechos delictivos a través de sus redes sociales, e incluso aseguraba que había patrullamientos constantes en dicha localidad.
A penas unas semanas atrás del secuestro de Fernando Tinoco, previo al novenario en honor a la patrona de la comunidad Santa Ana, se llevó una misa para pedir por el regreso de cuatro personas que fueron secuestradas desde el mes de marzo, sin que hasta el momento se conozca de su paradero.