por: Heriberto Hernández / Maritza Mena / Osvaldo Macuil
TLAOLA, Pue.- Aún no superan el luto de sus
La carretera interestatal que conecta a esta junta auxiliar deTlaola, prominentemente indígena, se encuentra colapsada en untramo o bien con fracturas, ramas o lodo en otros puntos, lo quedificulta la llegada de ayuda, como lamentó el edil subalternoLuis Picazo Tlacomulco.
Ante la contingencia, afectados solicitaron la ayuda de lasautoridades, ya que hay desabasto de comida. “Que nos ayuden arescatar desaparecidos y a realizar limpieza de escombros, peronecesitamos más víveres”, suplicó.
Esta comunidad vive casi bajo el agua, el río que la cruzaba sedividió en dos y parte del cauce cambió y ahora corre por suscalles y entre algunas viviendas.
Mientras tanto en
la ansiedad y la incertidumbre se ha trasladado a los albergues, endonde los damnificados han encontrado un espacio para comer, dormiry recibir ropa, pero sin dejar de preocuparse por su futuroinmediato. Menores de edad reciben apoyo de trabajadoras socialesante la ausencia de sus padres desaparecidos o muertos.Por los pasillos de los refugios habilitados por el gobiernoestatal se escuchan las historias de terror que vivieron la nochedel sábado las personas que habitaban la periferia deHuauchinango. Desde relatos de personas que salieron a tiempo pormiedo a ser sepultados en su propiedad por el alud de tierra, hastade quienes salieron de los escombros y se declaransobrevivientes.
El sonido de un mariachi rompe, desde lejos, el silencio que aratos existe en este pueblo mágico pero el fin no es de fiesta,todo lo contrario, se trata del
de Natalia y Marisol, madre e hija, quienes quedaron sepultadas consu casa en un deslave la noche de este sábado.https://youtu.be/HH7ZrIRXSFU