TEHUACÁN, Pue.- La desesperación y la tristeza de no poder ver a sus hijos desde hace más de 5 meses, llevo a que los hermanos Romero Ramírez, escribieran una carta desde el interior del penal, en la que imploran justicia al tiempo que reiteran que la Fiscalía General el Estado (FGE), les ha fabricado un delito que no cometieron; Fanny y Emmanuel solo compraron un celular relacionado con un homicidio sin saberlo, señalan.
El 14 de octubre inició la pesadilla para estos hermanos, días antes habían comprado un teléfono celular que le ofreció una compañera de trabajo de Emmanuel, el lo adquirió y se lo vendió a su hermana, sin saber que le entregaba un pase a la prisión por el delito de tentativa de homicidio contra una autoridad, hecho que aseguran no existió.
Tras ver que las autoridades no han atendido los llamados de su madre que se ha manifestado en la casa de Justicia de Tehuacán, pidiendo la intervención del gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, hoy son ellos los que a través de un escrito hecho a mano, en su celda del penal de esta ciudad, piden justicia de manera pública.
Tanto Fanny como Emmanuel, explican que el pasado 14 de octubre del 2020, siendo aproximadamente las 15:00 horas ambos fueron detenidos con engaños por parte de Agentes Estatales de Investigación (AEI), por el delito de cohecho, ya que el celular que ellos compraron pertenencia a una mujer que días antes fue encontrada sin vida, después de ser reportada como desaparecida.
Ambos narran la angustia y el miedo que vivieron durante más de 10 horas en que los transportaron en una camioneta, amenazándolos constantemente de que ya habían valido “madres”, pensando en algún momento de que se trataba de un secuestró, hasta que fueron entregados a las autoridades de Tecamachalco, en donde después de una audiencia los absolvieron de este delito.
Explicaron que al momento de salir por la puerta principal, nuevamente hombres armados los detuvieron aunque ahora por el delito de tentativa de homicidio contra funcionarios públicos, ya que supuestamente ambos habían atacado a los elementos en la primera detención, por lo que fueron trasladados al penal de esta ciudad, en donde han permanecido 5 meses.
Los hermanos explican que está detenida la mujer que les vendió el teléfono de nombre Jennifer, siendo para ellos la responsable de haberlos vinculado de un delito que desconocían y que a raíz de esto, ahora es la autoridad la que les está fabricando un delito para mantenerlos en la cárcel, por lo que piden justicia y el apoyo de parte de gobernador del estado.
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