Entre escándalos por presunta corrupción y abusos de autoridad, a poco más de año y medio de gestión, la delegada de los programas federales del Bienestar en la región de Huauchinango, Lizeth Aguirre Ortiz fue destituida del cargo, en el lugar fue designado Arturo Espíndola Martínez.
Tras el escándalo más reciente que fue nota nacional, en donde cientos de afectados del huracán Grace irrumpieron en una reunión que presidió, Andrés Manuel López Obrador, en el Salón Social del Recinto Ferial de Huauchinango, la funcionaria federal fue destituida del cargo.
En cambio, antes fue acusada por presuntos actos de corrupción en el manejo de los programas, como es el caso de “La Escuela es Nuestra”, en donde varios comités de padres se quejaron de ella, por ejemplo, en el municipio de Venustiano Carranza.
Los damnificados argumentaron que los apoyos que serían para ellos, se dirigieron a familiares, amigos y hasta compadres de personas allegadas a Lizeth Aguirre Ortiz.
Después de la visita de López Obrador a Puebla, la ahora ex delegada dijo que se encomendaba a Dios pero que tenía la seguridad de ver de frente a las personas. No obstante, reconoció que en la entrega de apoyos a damnificados por el paso del huracán Grace, algunos familiares de los Servidores de la Nación fueron beneficiados.