“Nosotros vamos a trabajar con la gente que ha estado con el proyecto fuerte, con gente profesional, ya el tema del Sindicato pues tendrá otra área jurídica que tenga una resolución”, fue la respuesta del edil electo de Cuautlancingo, Omar Muñoz Alfaro, al responder el cuestionamiento si reconocerá o no a los trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento.

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Mencionó que actualmente el caso del Sindicato está en medio de un litis (conflicto) y su tratamiento jurídico es diferente.

“Nosotros estamos enfocados a arrancar un proceso el 15 de octubre que sea beneficioso para las y los ciudadanos de Cuautlancingo, son más de 140 mil ciudadanos en nuestra atención y nuestro principal objetivo es responderle a esas demandas que nos hicieron durante campaña”, indicó.

Con lo anterior, puntualizó que su principal objetivo de trabajo es dar soluciones a dos problemáticas que ha detectado desde el 2018, que es la falta de agua potable y la inseguridad.

Se tienen que atacar los problemas que desde años aquejan a los habitantes, y ya el litis del Sindicato de trabajadores tendrá un tratamiento jurídico especial, sumó.

Al pedir su opinión sobre la exigencia del pago de 70 millones de pesos que reclama el Sindicato Único de Trabajadores del Ayuntamiento de Cuautlancingo a las autoridades en turno y que por el cierre de administración el tema será trasladado al gobierno que encabezará a partir del próximo mes, Muñoz Alfaro reiteró la importancia de revisar jurídicamente el expediente, porque de eso se desprenderá una respuesta pertinente.

“No podemos dar una respuesta pronta sin antes revisar el expediente jurídico, ya una vez revisando el expediente que será abierto una vez entrando a la administración, porque ahorita estamos imposibilitados en abrirlo y a parte no tenemos jurisdicción para hacerlo, ya que sólo hay dos partes involucradas que es el municipio y el sindicato las autorizadas, pero en cuanto se pueda, lo haremos”, sostuvo.

El edil mencionó que hasta que arribe al cargo, que será el día 15 de octubre, comenzará a anotar las observaciones que lleguen a detectarse en el Ayuntamiento.

Se analizarán, continuó, aquellas que han sido ventiladas por la Auditoría Superior del Estado (ASE) pero de existir más, éstas serán asentadas con puntualidad en los órganos fiscalizadores que correspondan.