San Martín Texmelucan, Pue.- Por más de 50 años, cuatrogeneraciones de la familia Bravo Escobar se han dedicado a elaborarlos tradicionales gallitos de pepita de calabaza de diversostamaños, que son colocados en las ofrendas de la temporada deTodos Santos y que son comercializados en las calles, casa por casay en mercados de la región.
Ángela Bravo Fernández, de 75 años de edad y originaria deTexmelucan, desde los 20 años de edad con apoyo de su mamá seenseñó a preparar la masa y elaborar los tradicionales“gallitos” y ahora ella le ha transmitido sus conocimientos asus 9 hijos, a la vez estos han enseñado a sus hijos e hijas, esdecir que han pasado cuatro generaciones que se han dedicado arealizar este dulce típico.
Angelita, como la conocen en esta ciudad, dice que desde el 15de octubre se empieza a limpiar la pepita de calabaza, se dejasecar al sol, se echa a remojar con agua caliente, se lava enrepetidas ocasiones hasta que se le cae el hollejo –que es unaespecie de telita que cubre la pepita–, se enjuaga, después semuele en el molino, se echa en una cazuela grande donde se colocaazúcar y se bate hasta que queda preparada la masa.
A la par se preparan los rollitos de papel crepé o china, secortan en tiras hasta la mitad, se compra colorante para pintarmasa, lentejuela negra y laminillas de baño de oro; al tener lascosas se preparan las bolitas para realizar la figura manualmente yse adorna, trabajo que debe quedar concluido del 22 al 24 deoctubre, porque a partir del 25 del mismo mes se empiezan acomercializar los gallitos de dulce en las calles, casa por casa yen los mercados, porque deben estar colocados a partir del 28 conlas primeras ofrendas.
Ángela Bravo Fernández indicó que por lo menos hace de 4 a 5mil gallitos para la venta, pero como lo hace junto con sus hijas ynietos, logran hacer alrededor de 15 a 20 mil gallitos, queexpenden en los accesos al mercado municipal “Domingo Arenas”,y compiten con otras 8 familias del municipio que también sededican a elaborarlos en esta temporada de muertos.
Agregó que a lo largo de los años, hay personas que cadatemporada de muertos acuden a Texmelucan a adquirir cientos degallitos en sus diversos tamaños para llevarlos a la Ciudad deMéxico, Puebla y Tlaxcala para comercializarlos, incluso haypersonas que tienen familiares en los Estados Unidos, y estos alseguir conservando las tradiciones mexicanas de colocar susofrendas en sus hogares, les envían, vía paquetería, losgallitos de pepita de dulce y calaveritas de azúcar.