Sin agua potable es como las familias de Acatzingo enfrentan la cuarentena por la pandemia de coronavirus, ya que la falta del vital líquido se recrudeció en las últimas semanas y a pesar de los constantes llamados a la autoridad municipal, no se ha logrado regularizar el servicio, por lo que piden la intervención del Gobierno del Estado.
Vecinos del barrio de San Antonio, ubicado cerca del centro histórico, explicaron que llevan seis semanas sin agua potable, lo que complica cumplir con las medidas sanitarias emitidas por las autoridades federales para evitar el contagio del Covid-19.
“Nos dicen que nos lavemos las manos y con qué agua”, interrogó una ama de casa, quien se dijo preocupada por el tema de la salud, además comentó que el agua potable es indispensable para realizar todas las tareas de hogar, y más ahora que los niños están en casa.
Asimismo, habitantes de los barrios de El Calvario y Maravillas señalaron que la falta de agua en estos momentos es una situación muy grave para ellos, ya que no pueden estar comprando pipas de agua constantemente, porque a causa de la pandemia del Covid-19 no están trabajando.
“Una pipa grande cuesta hasta 600 pesos, comemos o nos compramos una pipa de agua”, expresó un padre de familia visiblemente afligido, pues comentó que la empresa para la que laboraba cerró sus puertas.
En el barrio Nuevo Guadalupe las cosas no son distintas, al contrario, los pobladores informaron que tienen varias semanas sin agua potable y no saben que hacer porque tampoco pueden estar comprando pipas de agua a cada rato.
Recalcaron que si bien es cierto la falta de agua potable en Acatzingo es una problemática de años, las autoridades municipales encabezadas por el edil, José Norberto Manuel Rosales García se comprometieron en campaña a resolverlo, pero no lo han hecho.
Detallaron que han entregado múltiples oficios en la presidencia municipal solicitando la regularización del servicio de agua potable, sin embargo, es la fecha que no ha obtenido ninguna respuesta.
“Siempre que vamos a buscar al presidente municipal nunca está, hemos buscado una audiencia con él pero siempre nos dicen lo mismo, mientras tanto el pueblo de Acatzingo padeciendo y eso no se vale”, coincidieron los entrevistados.
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Finalmente, los afectados hicieron un llamado al gobernador del Estado, Luís Miguel Barbosa Huerta para que intervenga en esta problemática que afecta a poco más de 25 mil habitantes de la cabecera municipal, de acuerdo al censo INEGI 2010, quienes ante un brote de Coronavirus no tendrán como enfrentarlo, principalmente las familias de escasos recursos.
Sobre el tema este medio de comunicación buscó una entrevista con las autoridades municipales de Acatzingo, pero ésta fue negada.
