Chipilo está perdiendo su vocación ganadera porque el precio de la leche es bajo y eso motivó a varias familias a cerrar sus establos, pues ahora solo quedan 60 de los 500 que antes eran observados, en prácticamente todos los patios de los hogares, afirmó el presidente auxiliar de esta comunidad, perteneciente al municipio de San Gregorio Atzompa, Carlos Minutti.
Tan solo ejemplificó que el litro de leche es pagado al gremio a un precio de 6 pesos con 50 centavos, cuando producirlo cuesta 6 pesos con 40 centavos, siendo la ganancia de apenas 10 centavos.
Este escenario -continuó- desmotivó a la mayoría de los propietarios de establos, que al observar la falta de utilidad económica, comenzó a vender sus vacas.
Y eso originó que Chipilo, este perdiendo el título de comunidad ganadera porque ahora en la zona se contabilizan unos 60 espacios de esta índole, cuando en la última década eran unos 500.
Además contó de otros factores que también desalentaron la producción de leche, entre ellos la falta de apoyos institucionales por parte de las autoridades de los diferentes órdenes de gobierno, así como el crecimiento poblacional en Chipilo, porque en este último, varios ganaderos han emigrado a otras jurisdicciones poblanas como San Salvador El Seco, Guadalupe Victoria y otras integradas al Valle de Chalchicomula de Sesma, porque ahí todavía hay reservas agrarias donde puede desempeñarse esta producción.
“El gobierno ha olvidado el campo, no hay apoyo, sus representantes no dan importancia a esta actividad que, si no se ejerciera dos días seguidos, colapsaría la producción de alimentos en el país”, añadió.
Ahora indicó que las familias de Chipilo, están abriendo mueblerías o maquiladoras, otros oficios generadores de empleos.
Por último externó que esta zona mantendrá vigente la producción de leche y quesos, hasta que el último establo cierre, pero auguró que eso podría suceder en un corto plazo porque no hay apoyo al campo.