ATLIXCO, Pue.- Alrededor de 6 mil 500 atlixquences corren riesgoen la temporada de lluvias porque se registran inundacionespluviales y fluviales en los asentamientos humanos de lascercanías de los ríos, y en especial a la barranca de Metepec y alas colonias La Villa, Maravillas I y II, Santa Mónica, PrimoVerdad y Santa Cecilia Axocopan”, advierte el Atlas de RiesgoMunicipal.
Las autoridades indicaron que generalmente los asentamientoshumanos poseen vinculación con el desarrollo industrial ytecnológico; es decir, con las plantas de generación de energía(eléctrica, combustibles, químicos y derivados), y deprocesamiento de productos diversos y sustancias peligrosas:derrames de petróleo, fugas radioactivas y explosiones.
[caption id="attachment_406210" align="aligncenter" width="400"]Indicadores meteorológicos refieren que durante esta semanacontinuarán con intensidad los aguaceros.[/caption]
LAS HISTORIAS
Familias viviendo en una cueva, habitando en casas de cartón,invadiendo terrenos federales convertidos en ‘propiedadprivada’, subsistiendo debajo de puentes junto a auténticosbasureros llenos de cadáveres de perros y hasta montados en elafluente de la barranca Cantarranas–Metepec, es la escenografíade una obra urbana con final de alarma.
Durante un recorrido por esta zona, junto a personal deprotección civil, la bitácora final y oficial es la siguiente:“unas mil 800 familias, equivalentes a 10 mil personas, ubicadasen la franja de esa cañada entre el municipio de Atlixco y de SanJuan Tianguismanalco viven desde hace 20 años en constante peligroporque siguen comiéndose los terrenos del río y con algunasprecipitaciones pluviales de gran intensidad volverán a recordarel desastres de hace una década”.
La barranca Cantarranas–Metepec comienza en una de las partesaltas del cono volcánico del Popocatépetl. Atraviesa todo Atlixcoy algunos municipios más cercanos como San Juan Tianguismanalco yHuaquechula hasta llegar a los límites de Puebla con la vecinaentidad de Morelos.
Para conocerla basta asomarse un poco a las entrañas del ríoNexapa. Fueron escogidos tres diferentes escenarios con el objetivode descubrir una realidad a todas luces irrebatible. El primero, enla colonia Valle Sur, muy cerca del área destinada a la base del16 Regimiento de Caballería.
Ahí uno de los pequeños puentes soporta la sobrecarga de unenorme tronco arrastrado por la fuerza del afluente. El pedazo deárbol está ‘atrapado’ entre una telaraña de hierbas ybasura. El agua, por el momento con niveles bajo de presión, paseaen los alrededores. “Eso representa riesgo y vulnerabilidad paralas casas construidas a tres metros. Es un fenómeno repetitivo.Aquí es necesaria limpieza”, cuenta uno de los dueños de unavivienda.
Muy cerca, en la colonia San José (limita con Valle Sur), elEjército Mexicano ‘cerró’, mediante construcciones delcuartel, parte del afluente. Del otro lado de la calle de tierra, yen plena zona federal, 20 familias edificaron casas en medio de loscarrizos. Otras más dejaron la obra negra.
En la entrada a la junta auxiliar de San Diego Acapulco, alláen el sur de la ciudad –por la carretera a Izúcar deMatamoros–, existe otro puente. El ruido de la barranca marca elcamino a seguir de una diminuta familia. Es una mujer y el pequeñohijo. Ambos pobres, pero más pobre y desalentador es el entorno:viven 40 metros en la profundidad de la barranca en una casa decartón de casi cuatro metros cuadrados.
Cuentan con una piedra como lavadero bajo ese árbol larguísimoy viejo. Quizá 15 ó 20 pasos separan la puerta de la vivienda delrío. “Los problemas, además de una posible crecida del río,son dos: no tiene energía eléctrica y seguramente alumbran lanoche con una vela. Y con un hogar construido de cartón, noqueremos imaginar un descuido; y otra: los árboles atraen losrayos en una tormenta eléctrica. En caso de suceder, encenderíatodo”, explicó uno de nuestros acompañantes.
Dos atmósferas más de la barranca Cantarranas–Metepec. Una:la colonia Maravillas coexiste en medio de dos cerros. Es undesfiladero. La historia no es nueva de cómo poco a poco quedóinvadido el lugar. Tienen ya todos los servicios públicos. Casasde adobe y niños corriendo por todos lados.
Ahí, en donde en 1997 la corriente del río cobró las primerasfacturas cuando arrastró un automóvil provocando la desapariciónde una persona y la muerte de otra, y en medio de un puenteflotante amarrado de dos árboles en los extremos, llega lareflexión: “esto creció considerablemente en los últimos nueveaños. A finales de la década de los 90 llevamos a cabo un censo yentonces eran 850 familias. Sin duda ya deben ser mil más. Esoequivale a casi 10 mil personas. Desafortunadamente en muchos casosla única manera de recordarle a la comunidad los peligros es conotra tragedia”.
–Aquí cada vez es menos el ancho del río y de la barranca,cuestiona el reportero...
–Desde luego. La naturaleza abrió la barranca aquí porqueera necesario. Y en un momento determinado buscará el cauce yterminará por llevarse todo. La naturaleza tiene memoria parareconocer territorios y rumbos, apeló Alfredo, un resignadovecino.
POSIBILIDADES
Tras las intensas lluvias de los últimos días caídas en elmunicipio, la dirección local de Protección Civil prendió lasalarmas rojas para solicitar a las decenas de familias que vivencerca de los ríos en pensar desalojar sus viviendas y de esamanera evitar una tragedia.
Sin embargo, vecinos asentados en colonias como Maravillas y LaJoya respondieron que eso no es posible, ya que dejar el patrimonioconstruido en los últimos años, a pesar de tratarse de zonasfederales o de alto riesgo, sería una equivocación.
De acuerdo con la información oficial, durante la últimasemana Atlixco resintió la llegada varias precipitacionespluviales que alcanzó, en menos de 72 horas, 47 por ciento de lacantidad de agua que se tiene previsto aparecerá con la temporadade lluvias 2016. Incluso se adelantó que los indicadoresmeteorológicos refieren que durante esta semana continuarán conintensidad los aguaceros.
Al respecto, diversos funcionarios lanzaron el exhortocorrespondiente a los ciudadanos asentados en estos lugares paraque no tiren basura en las barrancas, ríos o laderas ya que estasen tiempos de lluvia provocan taponamientos, desborde de ríos y enconsecuencia inundaciones.
Las autoridades señalaron que las áreas con mayor riesgo, lospuntos rojos o vulnerables a inundaciones son las colonias ValleSur, Santa Mónica y Maravillas en donde más de 4 mil personasviven.
Los trabajos para los próximos días, adelantó, será removerbasura, rocas grandes y árboles caídos o a punto de caerse; labasura será tarea del departamento de limpia y las piedras sedepositarán en los lados de la barranca para también evitarinundaciones.
Cabe mencionar que en ese mismo sentido, más de 4 mil personasen este municipio viven en asentamientos humanos irregulares,informó el regidor de Agricultura y Ganadería, Jorge MarioBlancarte Montaño, quien solicitó ante el Cabildo se apruebe elPrograma de Regularización de la Tenencia de la Tierra.
Esto se suma a la versión de que en Atlixco está gestándoseun fraude de magnitudes considerables con la venta indiscriminadade lotes, los cuales en su mayoría no cumplen con los requisitosadministrativos y legales para su comercialización, alertó
El asunto de los asentamientos irregulares, dijo, no es un temade diagnósticos, es una coyuntura de legalidad. “En un momentodeterminado no preocupa tanto que estén fuera de los términosmarcados por las autoridades, es de mayor relevancia el hecho desituarse en espacios que de alguna manera inhiben el desarrollo delmunicipio”.
Tras recibir la aprobación, el regidor explicó que en Atlixco,como consecuencia del crecimiento de la mancha urbana, existenasentamientos humanos irregulares, que son aquellos lugares dondese establece una persona o una comunidad que está fuera de normasestablecidas por las autoridades encargadas del ordenamientourbano.
Aceptó que infortunadamente estos asentamientos irregulares enel municipio ya se formaron, sin reconocimiento legal,expandiéndose a los bordes de la ciudad en terrenosmarginados.
Al no poseer título de propiedad formalmente, señaló, esasfamilias atlixquences ven limitadas sus perspectivas de progresofuturo y a menudo conllevan en la vida cotidiana mayor presupuestode mantenimiento que una vivienda de asentamiento formal, porejemplo pago de pipas de agua.
Explicó que el municipio se tiene conocimiento de asentamientosirregulares en los ejidos de Tejaluca, Santa Cruz Tehuixpango,Colonia Agrícola Ocotepec, lo que acumularía unas 4 mil personasen estas condiciones.