Extorsión y cobro de piso de parte de supuestos integrantes de la delincuencia organizada enfrentan comerciantes y productores de cítricos en el municipio de Francisco Z. Mena, quienes han solicitado la intervención de las autoridades federales para fortalecer la vigilancia en la zona limítrofe con el estado de Veracruz.
De acuerdo con versiones de algunas personas cercana a víctimas de los hechos, lo que están sufriendo es la extorsión en la conocida modalidad de “cobro de piso”.
Otros datos, proporcionados por autoridades municipales, como es el caso del presidente municipal, Gildardo Vargas García, apuntan a que la zona más afectada en este tema son las localidades como Plan de Arroyo, La Mina y La Esperanza que coincidentemente están en la franja que colinda con el municipio de Álamo, del estado de Veracruz, una demarcación también conocida por su alta producción citrícola.
Gildardo Vargas dijo que lo que está ocurriendo ya lo turnaron a las autoridades federales, por lo que se está haciendo permanente la vigilancia con elementos de la Guardia Nacional (GN), ésta realiza patrullajes en distintas horas y también hay una coordinación con las corporaciones estatales y locales.
A pregunta expresa sobre la forma de operar de los presuntos integrantes de la delincuencia organizada y si éstos pertenecen a algún grupo específico, respondió que desconoce de más detalles, porque es un tema del que ya se está haciendo cargo la federación con la Guardia Nacional.
El tema fue expuesto este 24 de octubre en una reunión de seguridad a la que acudió el munícipe en la ciudad de Puebla, de la que tampoco dio más datos.
El problema también ha sido abordado por el regidor de gobernación en Francisco Z. Mena, Jorge del Ángel Vicencio, quien fue cuestionado sobre la falta de policías municipales y admitió que sólo existen 32 elementos para igual número de comunidades, aunque prometió incrementar la cantidad de policías para inicios del próximo año.
Jorge del Ángel Vicencio también aceptó que se está trabajando en comunidades que están en los límites con el territorio veracruzano, en donde delincuentes exigen cuotas a algunos ciudadanos, y admitió que el problema “es complicado, pero estamos atendiendo los problemas”, según dijo