Adeudos de más de medio millón de pesos, además de pagos pendientes de tenencia de vehículos que ya no existen en el inventario y hasta movimientos bancarios realizados después de la entrega-recepción, detectó el gobierno municipal de Ixcaquixtla, como saldo financiero de la administración saliente que encabezó el exalcalde Tomás Romero Reynoso.
En entrevista, el alcalde en funciones, Salvador Castañeda Luna, declaró que por mencionar uno de los adeudos, está el del municipio con la Secretaría de Finanzas, dependencia que le está requiriendo el pago de 415 mil pesos por impuesto sobre la nómina de 2017 y 2018 que el Ayuntamiento no pagó.
El munícipe declaró que no puede liquidar todas las deudas que dejó el exalcalde Romero Reynoso, por falta de recursos y porque lo considera injusto. Además, agregó que es el exmunícipe, quien tendrá que responder ante la Contraloría del Estado, por todos los requerimientos que tiene pendientes y de los cuales en su momento se les hizo de su conocimiento a través de actas que ellos reconocieron y firmaron.
Castañeda Luna, mencionó que no se encontró el libro de cabildos del 2018, no recibió ninguna documentación del área contable, vehículos que solo están en la lista de inventarios, pero físicamente no, ni mucho menos escrituras de los bienes del municipio.
“A mí me requirió apenas la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que tenía un adeudo, por más de 60 mil pesos, por concepto de energía eléctrica del auditorio municipal, porque la administración pasada no pagó durante los cuatro años, porque se estaban robando la luz, se colgaron de los cables”, comentó.
Explicó que la pasada administración dejó muchos incumplimientos en cuestión de que no hizo reportes, como el de varias obras que no subieron al sistema y por ello, Finanzas está requiriendo se haga la comprobación de dichas obras, de las cuales agregó, tampoco hay documentación.
Acusó que dejaron un pozo, sin funcionar, porque no hicieron la contratación con la CFE, porque tampoco tenían la concesión, ni el expediente. Dijo que aún falta checar la línea de conducción que también la dejaron mal y además de que el pozo está en un predio en comodato por diez años, pero que ya transcurrieron cinco años y solo le resta la mitad de tiempo para poder utilizarlo.
Otra deuda más, es de la tenencia de todo el parque vehicular, pero dijo que lo peor es que ni siquiera están los vehículos, aparte contó que dejaron una patrulla en un taller, pero que en la entrega-recepción mostraron el recibo del pago que se hizo por 50 mil pesos; sin embargo, el mecánico comprobó que él no lo cobró, por lo que se presume que el exedil se quedó con el recurso.
Señaló que dejó desmantelado el Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado, vendió vehículos que el Ayuntamiento tenía en comodato y otros lo remató, como es el caso de una retroexcavadora.
Por último, denunció que después de la entrega-recepción la autoridad saliente hizo movimientos en el banco por más de 300 mil pesos de los recursos públicos.
Por lo anterior, el alcalde en funciones mencionó que esto afecta al ayuntamiento, pues se tienen que solventar algunas deudas y componer lo que dejó mal la autoridad pasada, no obstante, reconoció que Tomás Romero tendrá que responder por lo demás a la Auditora Superior.