Tehuacán, Pue.- Incontrolable la presencia de la garza “garrapatera” en diferentes punto de la ciudad, su presencia causa una fuerte contaminación y los espacios públicos dejan de ser visitados por las heces fecales; autoridades hablaban de una inversión de 80 mil pesos para colocar bocinas con ruidos de aves depredadoras para que las ahuyentan.

Con una inversión de 80 mil pesos, las autoridades municipales pretenden dar solución a un de los problemas más graves que tiene la ciudad, pues parvadas de aves se han concentrado en espacios públicos que han dejado de ser utilizado, por la contaminación que generan; el parque de la colonia Benito Juárez, el Paseo Hidalgo, así como la escuela Primaria Pastor Roauix y ahora el estacionamiento de la plaza comercial El Paseo, son las zonas afectadas.

Expertos mencionaron que a raíz de que el relleno sanitario de santa María Coapan, dejó de operar y de tener basura, estas aves que ahí se concentraban emigraron hacia la ciudad, encontrando enormes laureles que han servido para refugiarse, solo que al haber cientos de ellas, sus heces fecales se esparcen por todo lados.

En el caso de la escuela Primaria Pastor Rouaix, los padres de familia tomaron la decisión de cortar el enorme árbol que estaba en la entrada principal, pues además de que toda la fachada estaba manchada de excremento, tanto el olor y la presencia de un “piojo” que llegaba a la cabeza de los alumnos, causó preocupación en esta institución.

Para los vecinos de la colonia Benito Juárez, quienes viven un costado de este lugar se han resignado a vivir con este problema, pues al ser muchos los árboles no han querido que estos sean podados, tanto carros y fachadas de las casas, todo contaminado, además de que este espacio ya no puede ser ocupado por los menores, ya que bancas, juegos lúdicos y canchas están llenas de heces fecales.

En plaza comercial, la zona de estacionamiento, también tiene este tipo de problema por lo que de igual manera se evita dejar los carros en esa zona; ante estos problemas, las autoridades han mencionado que destinar alrededor de 80 mil pesos, será para la compra de bocinas que serán colocadas en los árboles, con sonidos de aves depredadoras, esperando que esto las ahuyente.

Cabe mencionar que algunos expertos, que han visto que este método no funciona, han propuesto que se adquieran ardillas, ya que de esta manera al vivir en estos espacios, hace a que las aves no se queden, aunque buscarían otro lugar para refugiarse.