Sin poder solucionar problemas pendientes como el manejo de desechos urbanos y la inseguridad pública en el municipio de Huauchinango, el presidente Gustavo Vargas Cabrera se separaría del cargo en las próximas semanas para buscar la candidatura a la reelección, aunque también su nombre ha aparecido como posible abanderado a la diputación local por el 02 distrito.
Dos problemas han sobresalido durante su gestión municipal: el del manejo y destino final de los desechos sólidos que, hasta la fecha se ignora el sitio donde los están tirando, y el de la inseguridad que arrojó al cierre de año focos rojos en robo a casa, robo a negocio, lesiones y violencia familiar.
En medio de estos temas, a dos años de gobierno y en la recta final del trienio, el argumento del morenista es que “ambos (fueron) heredados de administraciones pasadas”.
En el caso del manejo de los desechos, Vargas Cabrera se comprometió desde el inicio de su administración a la construcción de un relleno sanitario o a la instalación de una “fábrica de basura”, con la que se transformarían los desechos en energías (gas, en electricidad o hasta en fertilizante), pero hasta ahora no se ha concretado la solución, debido a un mal manejo de la política para la obra. Incluso, tras quedarse sin un sitio para tirar la basura, primero la almacenó en un predio municipal y después ocultó el destino final de los mismos con el argumento de que los opositores políticos podrían ir a bloquear el sitio, por lo que se desconoce hacia dónde se llevan las toneladas de basura que se recolectan en el municipio, así como el costo del servicio.
En cuanto a la inseguridad, el Ayuntamiento de Huauchinango anunció una inversión millonaria en cámaras de video vigilancia, misma que, algunas no funcionan porque en la ciudad no existe la calidad de Internet que los aparatos necesitan para emitir la imagen necesaria a la base de policía.
Por el contrario, lo que opera cada vez con mayor eficiencia, son algunas bandas que se dedican al robo de autopartes, de vehículos, robo en casas, asaltos a comercios y a transeúntes.
El edil dio a conocer hace pocas semanas, que estaría separándose del cargo, “esperando los tiempos”, para buscar la reelección, y también dejó claro que antes sopesaría, “si es que me alcanza o no, es lo que hay que valorar”, sin embrago, hasta el momento no se ha dado a conocer si ha cambiado de opinión.
Algunos funcionarios de su confianza han citado que sólo esperan que el alcalde les anuncie que se va del cargo para incorporarse a la puja por la candidatura a la reelección y sería por alguno de los partidos de la cuatroté: Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) o el Partido del Trabajo (PT), ya que se sabe que ambos irían en la coalición que formaron en el proceso del año 2018, misma por la que llegó al poder el munícipe.
DIVISIÓN DE LA CUATROTÉ
Por otro lado, también se ha manejado el nombre del ex presidente municipal, Rogelio López Angulo, ex priista, quien ahora busca la candidatura a la alcaldía de Huauchinango por el PT. Rogelio López Ángulo es uno de los rivales más conocidos de Gustavo Vargas Cabrera, no sólo en la política, sino en la vida real.
A decir de morenistas y petistas, Rogelio es uno de los más posicionados rumbo a la candidatura a la alcaldía, por lo que también, fuentes cercanas a Gustavo Vargas, han sugerido que el plan B para el edil actual, es la diputación local, en una “incómoda fórmula” con Rogelio López Angulo, lo que se convertiría, advierten, en una división al interior de la coalición.