A escasos días de que un nuevo hospital general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) sea inaugurado en Cuautlancingo, pobladores de este municipio que viven en las inmediaciones de este inmueble lo califican como un “respiro económico”, ya que ante la llegada de familias que acudirán a atenderse, vislumbran mejores ventas en sus negocios, principalmente misceláneas.
En un recorrido por esta zona, donde se observa que el nosocomio esta concluido, Miguel Ángel Vázquez González, propietario de la miscelánea “San Juditas” dijo que la llegada de este espacio ya favoreció su comercio.
Aunque explicó que por ahora las ventas han descendido, ya que muchos de los trabajadores de la construcción ya se fueron, pero una vez que sea inaugurado el escenario cambiará porque arribará más gente.
Desde su local, platicó que ahora hay más circulación de población en este punto habitacional cercano al Parque El Ameyal, porque antes no era transitado.
“Hasta los ambulantes llegan, en mi caso ellos son competencia para nosotros, porque así cómo llegan pueden irse y pues a mi me afectan con la venta de refresco, pero el gobierno de Cuautlancingo no los ha dejado instalarse y eso es bueno porque las baquetas y la calle deben estar libres”, asentó.
En otro puesto de dulces y pollo fresco, María Magdalena González Castro, expuso que la venta de sus productos van a la alza.
No obstante, externó su desacuerdo en torno al ordenamiento de la autoridad municipal para que no ocupe su banqueta con fines comerciales.
“No nos dejan salir y eso nos afecta, porque en mi caso estoy escondida y no ven mucho y ya no vendo como antes, deberían dejarnos salir porque eso nos ayudaría más”, asentó.
Por último, destacó que este hospital vino a revivir esta zona de Cuautlancingo, que antes estaba olvidada y no tenía objetivo comercial.
En otro punto, Yolanda, trabajadora de un puesto de gorditas y quesadillas, se limitó a decir que tras la construcción del hospital del IMSS sus ventas subieron y confió en que así sigan.