Comunidades indígenas de la Sierra Negra de Puebla anunciaron la conformación de guardias comunitarias, las cuales estarán armadas y serán entrenadas por un grupo del Estado de Guerrero. En una asamblea realizada hace unos días, fueron elegidos 45 hombres de la región, quienes serán los encargados de la vigilancia e implementar castigos a según sus usos y costumbres.
José Luis Leyva, dirigente del Movimiento de Autogestión Social Indígena y Popular (MASCIP), dijo que en estos momentos se ha puesto en la mesa la situación jurídica en la que se va a implementar la policía comunitaria, pues solo en la cabecera municipal es donde se cuenta con la policía, la cual es evidente que no está funcionando, pues no protege a la población.
Explicó que a diferencia de los que existen, los guardias que formen parte de este grupo de 45, es que la vigilancia de los pueblos lo harán con sus propias armas, que por lo regular son escopetas de calibre 16, y aunque está consciente de que el estado se opondrá a esto, dijo que ni ellos han podido contrarrestar la delincuencia en la mayoría de los municipios.
“Desde hace muchos años en nuestros pueblos ha existido la policía comunitaria, con la única variante es que no usarán garrotes, serán armas, respaldados en los usos y costumbres de nuestros pueblos, pues solo se abocarían a cuidar a los pueblos en donde se respeta esas costumbres”, señalo José Luis Leiva, quien dijo que los integrantes serán de Huitzila, Yohuajca y la cabecera municipal.
Comentó que después de un foro realizado en donde se dio a conocer la función de esta guardia comunitaria, vendrá personal de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CARAC) del estado de Guerrero, los cuales han mantenido a la policía comunitaria como sistema alternativo de seguridad y justicia, y pese a que han tenido problemas con la delincuencia, lo han sobrellevado.
USOS Y COSTUMBRES
El activista explicó que a inicios de cada año, los pueblos se unen en asamblea y nombran a los integrantes, tomándoles protesta frente a ellos, dándole el garrote, como símbolo de poder a los mandos y así cumplen un año, siendo ricos y pobres los que hacen la misma función, al ser conocidos, si se sospecha a que uno de ellos actúa de manera inadecuada, no se les da ese nombramiento.
En el caso de que alguno de ellos llegue a abusar del poder en contra de los habitantes de estas poblaciones de no más de 600 habitantes, la asamblea determina retirarle el cargo de la policía comunitaria y es castigado con prisión, trabajo social e incluso hasta pueden ser corridos del pueblo, sin permitir ingresar a él, por lo que difícilmente se registran abusos de su parte.
DESCONFÍAN DE POLICÍAS
Leiva Machuca dijo que para ellos la policía está coludida con la delincuencia organizada, siendo los generadores de homicidios de integrantes de la organización como la muerte de Ester Pacheco Orozco, quien fue asesinada de dos disparos en la cabeza por el comandante de la Policía Municipal, así como la muerte de Abad Savad, quien muriera de un disparo el día de las elecciones.
De igual manera dio como referencia la detención de Javier Izúcar Lino, quien fue señalado de ser el iniciador de una balacera entre policías e integrantes de este movimiento indígena, en donde cuatro personas resultaron lesionadas por arma de grueso calibre, las cuales son de uso de los policías municipales, sin embargo, su compañero fue torturado para que se declarara culpable.
De igual manera, hizo referencia a dos homicidios en comunidades lejanas a la cabecera municipal, en donde se les vio rondando a la Policía Municipal, siendo para ellos estos los delitos más graves que se han registrado en el municipio, acompañados de robo de ganado que se incrementó en esta administración, junto con otros abusos.