ATLIXCO, Pue. Después de casi dos meses de espera, arrancó lademolición de algunas casas en la junta auxiliar de Metepec. En elacto, representantes de los gobiernos local y federal prometieronentregar tarjetas bancarias en unos cuantos días con el objetivode que los damnificados accedan a recursos económicos para lacompra de materiales.
Armando Saldaña, director general de operaciones de laSecretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu),junto con el alcalde de Atlixco, José Luis Galeazzi Berra,arrancaron los trabajos para destruir casas severamente dañadaspor el temblor del pasado 19 de septiembre.
De acuerdo a la información oficial proporcionada en el eventode la junta auxiliar de Metepec, se trató de viviendas ubicadasfuera del polígono protegido por el Instituto Nacional deAntropología e Historia (INAH), y por esa razón no hay problemaspara derribarlas.
Los representantes de ambos niveles de gobierno dijeron a losdamnificados que pronto comenzará la reconstrucción de laspropias casas.
Y para consolidarlo, adelantaron, en los próximos días através, de la Sedatu, se entregarán las tarjetas de apoyo a lasfamilias afectadas para adquirir material de reconstrucción.
Cabe mencionar, hace más de mes y medio, vecinos de Metepeclanzaron quejas públicas por la actitud del INAH de no permitirlestirar y destruir su morada, a pesar de estar dispuestos a concretaresa acción con recursos propios.
EL LLANTO DE UN MENOR
Frente a la casa deteriorada y lejos de la “mano amarilla”de fierro destinada a destruirla por completo, está el pequeñoJuan.
De camisa verde y gorra de béisbol grande, no puede contener eldeslizamiento de algunas lágrimas por la escena: el fin de la casade la bisabuela... vivienda la cual desde luego también es sumorada.
Conforme el golpe de la “mano de chango” se entierra en losmuros de adobe, el llanto brota ante la mira de sus padres.
A punto de dar fin a la construcción, la madre del pequeñologró abrazarlo y prácticamente al oído alcanzó a decir: “note preocupes... es mejor por nuestra seguridad. Y vamos a levantarpronto otra casa ahí mismo”.
Ambos, madre e hijo, quedan fundidos en un abrazo. Ya paraentonces de la casa no hay rastros. “Las experiencias de laniñez de hoy”, soltó otro de los familiares testigos delmomento.
Y logran describirlo de la siguiente manera: “El nieto con sussentimientos encontrados al ver demoler la casa de la bisabuela(paterna) afectada por el sismo del 19 de septiembre”.
Este hecho, añadió otro integrante de esa familia “forjaráalgún tipo de madurez a muchos niños a pesar de su corta edad.Vivieron esa experiencia, incluso jamás presenciada por muchasgeneraciones en nuestro querido pueblo”.
Algunos de estos niños de la localidad coincidieron queperdieron casa, escuela y amigos. “Una experiencia muy fuertepara ellos con su corta edad”.
Pero más allá de la anterior historia, el reclamo de algunosvecinos sigue ahí: “los dueños de las casas censadas por laSedatu en Metepec, dicen, recibirán ayuda del gobierno.
Y finalizan: “Pero la ayuda es de acuerdo a la perdida: totalo parcial. Y en el caso de mi tienda, ubicada dentro de casafracturada por el temblor, de plano no quisieron censarla”.