La Fiscalía General del Estado de Puebla inició una investigación por la muerte de Ángel Tigre Aquino ocurrida el pasado viernes 10 de junio, cuando fue detenido por policías municipales, luego de que su esposa solicitara el apoyo policial y presuntamente habría sido golpeado en los separos de la comandancia.
Una revisión realizada por El Sol de Puebla confirmó que después del fallecimiento del detenido, el municipio luce con pocos policías, además de que el alcalde no responde las llamadas telefónicas ni se encuentra en la presidencia, además de que algunos funcionarios han dejado de asistir.
El detenido salió de los separos de Piaxtla el día sábado a las 8:00 de la mañana, sin embargo, ese mismo día fue llevado por familiares al Hospital General de Acatlán de Osorio, pero fue dado de alta el domingo por la mañana, pero el dolor en el estómago de Ángel era intenso, así que lo regresaron nuevamente en el Hospital General de Acatlán, por lo que el lunes 20 de junio fue operado, perdiendo la vida.
Este medio de comunicación tuvo acceso a un documento en el que se determina que el hoy occiso murió a causa de una “hemorragia subaracnoidea con edema encéfalo secundario a traumatismo craneoencefálico producido por contusión, como se refiere en la Necropsia de Ley realizada por un médico legista” que se encuentra en el Distrito Judicial de Izúcar de Matamoros.
Por lo anterior, hasta la noche de este jueves 16 de junio, la autoridad municipal a través de su página oficial “Gobierno de Piaxtla 2021-2024”, dio a conocer los mismos hechos ya narrados anteriormente, asegurando que el masculino de 45 años murió a consecuencia de cirrosis hepática.
En el comunicado cita: “El caso actualmente es investigado por Agentes Ministeriales de la Fiscalía General del Estado de Puebla, quienes abrieron una carpeta de investigación, para esclarecer este caso y hacer justicia por la muerte de este hombre originario de Piaxtla”.
Hasta ahora se desconoce si la familia ya interpuso una denuncia en contra de los policías municipales de Piaxtla, sin embargo, ha trascendido que casi no hay elementos de seguridad pública en la población, además de que la misma autoridad ha reconocido que no todos los uniformados estaban registrados.
Este medio de comunicación ha buscado al presidente municipal de Piaxtla, Miguel Maceda, pero no se ha tenido respuesta debido a que su teléfono se encuentra apagado y en las oficinas de la alcaldía te refieren “que no está”.
Fuentes extraoficiales dieron a conocer que es posible que el cabildo solicite que la policía estatal tome el control de la seguridad en el municipio, hecho que se acordará la siguiente semana.