Luego de la vinculación a proceso de María Hilda o Lili, habitantes de Zacapoaxtla y otros de la región, solicitaron a las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE), ampliar las investigaciones ante la posible existencia de más casos de jóvenes afectadas.
María Hilda, alias Lili es acusada por trabajos forzados en contra de una sola joven que logró escapar y presentar su denuncia, sin embargo, los comentarios en redes sociales de esta zona del estado, señalan que podrían ser más las jóvenes que fueron víctimas, porque algunas de ellas nunca retornaron a sus comunidades o lugares de origen.
María Hilda fue detenida el pasado 9 de marzo en el estacionamiento de un colegio ubicado en la colonia Jardines de San Manuel, en la ciudad de Puebla, surgiendo, entonces versiones respecto a otros abusos cometidos en contra de jóvenes oriundas de la Sierra Nororiental.
Aunque primero fue liberada y luego reaprehendida, debido a inconsistencias en su detención, María Hilda “N” fue vinculada a proceso por el delito de trata de persona, bajo el supuesto de trabajos forzados, dando continuidad a una denuncia interpuesta en 2019por una joven que, tras ser reclutada por la hoy detenida, la agredió físicamente de diversas maneras, privándola de su libertad y alimentos, además de incomunicarla y amenazarla.
De acuerdo con lo referido por vecinos de la región, sobre todo a través de redes sociales, por décadas, la mujer acudió a esta cabecera distrital para reclutar jovencitas, en su mayoría menores de edad, indígenas y de escasos recursos, quienes, ante la necesidad económica, eran engañadas y convencidas de ser llevadas a la ciudad de Puebla para trabajar.
De lo anterior, señalaron que, ante los abusos y amenazas cometidas por María Hilda, mejor conocida como Lili, fueron algunas jóvenes quienes nunca volvieron a sus hogares o comunidades de origen, existiendo casos donde incluso las familias perdieron total comunicación con ellas, sin que hasta el momento conozcan su paradero, pero de las cuales no existirían denuncias penales.
Por tal motivo, los inconformes en esta región solicitaron a las autoridades de la FGE implementar algún tipo de estrategia, con lo cual lograr que otras jóvenes y sus familias también interpongan sus denuncias, en contra de María Hilda y su esposo, éste quien habría fungido como cómplice para ejercer este sometimiento en contra de dichas mujeres y con lo cual ambos, puedan recibir el castigo correspondiente.