TEHUACÁN, Pue. Desde el linchamiento de un delincuente en LaCantera, en enero de 2015 y de los linchados en Ajalpan en el mesde octubre del mismo año, el tomar la justicia en manos de losciudadanos se convirtió en el mejor pretexto para hacer a un ladoa una autoridad procuradora de justicia, la cual permitió cientosde abusos con un nuevo sistema penal que daba mayores garantías alos delincuentes.
Este año 2017 no fue la excepción, pues cada mes se registróen la ciudad y en la región al menos un intento de linchamiento desujetos que supuestamente eran detenidos al momento de querercometer algún delito, terminando estas situaciones conenfrentamiento entre policías y ciudadanos que, molestos por laimpunidad, pedían dar al menos un escarmiento a los ladrones.
Una familia de jóvenes conocidos como “Los Acevedo”, fueronenfrentados por más de 500 habitantes de San Pedo Acoquiaco,quienes la noche del 30 de abril no solo arremetieron contra cuatrode sus propiedades, sino que fueron apedreados por horas para quesalieran de sus casas para ser linchados, pues días antes habíansido responsabilizados de la violación de una joven cerca dellugar.
La multitud logró prenderle fuego a uno de ellos que seencontraba en la planta alta de su casa, provocando que este cayeray muriera, mientras que horas después la Policía enfrentó a lamultitud para liberar al resto de los hombres que eran señaladospor atacar a vecinos de la zona, e incluso hasta a la PolicíaMunicipal.
Días después, en la colonia Tehuantepec, un joven que eraapodado “El Pepino” fue señalado de cometer un robo por lo quesus vecinos alertaron para enfrentarlo, sacarlo de su casa y agolpes dejarlo casi inconsciente en la vía pública.Posteriormente le prendieron fuego mientras su familia pedíaclemencia.
Desde esa fecha, en diversas ocasiones los ciudadanos hanpretendido hacer justicia por propia mano, al señalar poco apoyode las autoridades y dudas ante la impartición de justicia.
