Un grupo de vecinos de la comunidad de Tepexilotla en el municipio de Zoquitlán acusaron públicamente supuestos abusos cometidos por tres habitantes que son conocidos como “Los Caciques”, quienes habrían despojado de sus propiedades a cinco familias bajo amenazas y hostigamiento, manteniendo sometidas al menos 50 familias de esta población a las que les exigen pagos por sembrar y por utilizar el agua del río.
Los habitantes de esta población señalaron que contrario a lo que ha dicho el gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, sobre que en Puebla no hay caciques, es todo lo contrario, pues desde hace varios años han sufrido de los abusos de Francisco N, Alejandra N y Claudia N, habitantes de este municipio, mismos que son acusados de generar un problema social en estas comunidades.
Los vecinos indicaron que estos personajes presumen ser supuestamente respaldado por una organización indígena, así como por el presidente municipal, Claudio Montalvo, por lo que han venido hostigando, amenazando a al menos cinco familias, sin embargo, su forma de violentar a quienes se oponen a sus decisiones ha hecho que al menos 50 familias tengan que hacer lo que ellos piden, impidiendo incluso que se reúnan en lugares públicos, ya que aseguran es para acordar acciones en su contra.
De esta forma, los pobladores consideraron necesaria la intervención del gobernador Miguel Barbosa para que se tomen las medidas necesarias, justas y en su caso la sanción correspondiente a estas personas denominadas como “Caciques, ya que han llegado a cobrar el agua proveniente de un río y los obliga a realizar el pago de uso de suelo de viviendas y actividades agrícolas, quien siembra maíz, chile, café u otros alimentos, deben pagarles”.
Los inconformes explicaron que, además, les han prohibido actividades ganaderas, pese a que son de autoconsumo de la población, además realizan cobros de un predio, del cual no tienen poder ni derecho, ya que el único dueño con escrituras y derechos es la propietaria de nombre Lidia N: “Ya hemos iniciado un procedimiento legal en su contra, pero no pasa nada y siguen los abusos”.
Argumentaron que incluso en estas fechas de contingencia sanitaria por el Covid-19, siguen realizando dichos cobros, amedrentando a la población que se ha negado a hacer lo que ellos pidan, mandando a cobrar con gente armada y encapuchada, siendo para ellos ese el temor y la exigencia con la que piden que intervengan las autoridades del estado o del gobierno federal.
Indicaron que cuando intentan reunirse para hacer frente a esta situación, les envían a personas para intimidarlas y ver quienes están en su contra. Les han advertido que si no pagan van a ser despojadas por la fuerza pública, siendo al menos 50 familias afectadas.