ZACATLÁN, Pue.- Al menos 13 de los 22 aspirantes a la coordinación distrital federal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) firmaron un escrito de protesta e inconformidad dirigido a los dirigentes nacionales de los dos partidos más importantes de esta coalición, originado por su inconformidad ante lo que llamaron imposición de la actual diputada federal, Fátima Cruz Peláez, como la abanderada a la diputación federal en este distrito.
El documento de sólo dos páginas, firmado por 13 aspirantes, destaca por las firmas de la ex diputada local petista, María del Carmen Cabrera Camacho, el dirigente local morenista Alejandro Márquez Martínez, la reconocida activista y defensora social Evelia Hernández Juárez, así como Pablo Alejandro López Pacheco, ex director del Instituto Tecnológico Superior de la Sierra Norte de Puebla.
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Está dirigido, además de a los líderes nacionales de Morena y al Partido Verde Ecologista de México, a la precandidata a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum, Alejandro Armenta Mier, en su carácter de precandidato al gobierno del Estado, Olga Lucía Romero Garci Crespo, presidente del Comité estatal del partido guinda, así como a la Comisión Nacional de Elecciones.
En el segundo párrafo se puede leer: "Presentamos ante ustedes nuestra inconformidad por la imposición de la diputada federal Fátima Cruz Peláez, por no representarnos y no ser parte del proceso de encuesta de nuestro distrito 02, ante una designación de mesa y en el que no se cumplieron los acuerdos de los partidos y mucho menos las reglas establecidas, siendo el resultado de un proceso manchado de ilegalidad, sin transparencia y lo que es peor, no se cumplen los principios por los que estamos en esta transformación de conciencias".
Continúa señalando que cuando los ciudadanos son pisoteados ante una clara y evidente imposición, sólo queda hacer una única petición: que se revoque la designación de quien, dijeron, no los representa; pidieron a la representación del PVEM que hiciera lo suyo; también reafirmaron que continuarán apoyando a la aspirante presidencial.
Alegaron que a este distrito no correspondía nombrar candidato por parte del PVEM y que era una designación de Morena. Recordaron que todos los participantes en este proceso habían cumplido con lo que el partido les solicitó: trabajo, lealtad, compromiso con el proyecto nacional, que todos realizaron recorridos en los diferentes municipios de este distrito, como establecía la convocatoria y las reglas.
Señalaron que la decisión del partido no escuchó la voz del pueblo por lo que no puede decir que el pueblo es primero: "La reelección de la diputada abonaría a la división" en la diputación, ya que desaprovechó la oportunidad legislativa que se le otorgó hace tres años y nunca regresó a su distrito a trabajar.
El documento acusa que sólo se presentó a eventos para la foto, nunca tuvo una casa de gestión para las necesidades del distrito, no tuvo el acercamiento con los pueblos del distrito, no generó trabajo legislativo en representación de los derechos de los ciudadanos y mucho menos trabajo para quienes supuestamente fue elegida: los pueblos originarios.
Entrevistados por separado y visiblemente molestos, algunos aspirantes a la coordinación señalaron que el trabajo sería difícil si se mantiene esta imposición, toda vez que no habría argumentos para pedir el voto por alguien que no trabajó por los pueblos que dijo representar; señalaron que la inconformidad es tal que podría poner en riesgo la victoria en este cargo en la próxima elección de junio. Anticiparon que decisiones como esta solamente van a desmoronar al movimiento de transformación.