Las plantas tratadoras de aguas residuales en la región de la Mixteca se encuentran obsoletas y sin rehabilitar, como es el caso de la ubicada en el municipio de Acatlán de Osorio, población que cuenta con casi 38 mil habitantes. La semana pasada, se detectó la emisión de aguas negras al río Tizaac.
En esta zona sur del estado, se encuentran en las mismas condiciones las plantas de San Pedro Yeloixtlahuaca, Chinantla, Piaxtla y Chila de las Flores.
Cabe señalar que la mayoría de los municipios en esta región no cuenta con instalaciones de este tipo; los sistemas de drenaje desembocan en los cauces de los ríos o en terrenos a las afueras de las comunidades, lo que contamina las corrientes de agua y, en algunos casos, tierras de cultivo.
Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), menos de la mitad de los municipios en la Mixteca cuentan con un sistema para el tratamiento de aguas residuales.
Plantas sin funcionar
La planta del municipio de Acatlán de Osorio debería tratar entre 16 y 18 litros por segundo, lo que equivale a casi el 50 por ciento de su capacidad diseñada. Sin embargo, autoridades anteriores han reconocido que dejó de funcionar en 2014 y no ha sido reparada desde entonces, a pesar de haber sido promesa de campaña para algunos políticos.
Actualmente, las aguas negras se descargan directamente en el río Tizaac, provocando contaminación en la comunidad de Amatitlán (perteneciente al municipio de Acatlán) y afectando a los municipios de San Pablo Anicano, San Pedro Yeloixtlahuaca y Guadalupe Santa Ana, ubicados río abajo.
Los residentes se quejan del fuerte olor que emana del río, especialmente durante las noches o en temporadas de calor, cuando el olor intenso impide el sueño. Esta pestilencia es percibida por los visitantes desde su llegada a Acatlán, cuando pasan cerca de la barranca.
En San Pedro Yeloixtlahuaca, la planta de tratamiento tiene problemas; varias tuberías de drenaje están obstruidas, y las aguas negras han inundado algunas calles, aunque no son muy transitadas, representando un foco de contaminación.
Los ciudadanos han pedido la puesta en funcionamiento de la planta de tratamiento, pero hasta ahora no ha sido reparada, a pesar de los informes de administraciones municipales pasadas sobre su rehabilitación.
El agua negra de este lugar también va a parar a la barranca, pero la contaminación persiste a pesar de la distancia.
Una situación similar ocurre con la planta operada por los ayuntamientos de Chinantla y Piaxtla, diseñadas para tratar alrededor de 8 litros por segundo.
Las administraciones anteriores han reconocido el problema ambiental que representa el estado de la planta de tratamiento, pero no han concretado ningún proyecto para solucionarlo.
En Chila de las Flores, la planta de tratamiento ubicada en la comunidad de Francisco Ibarra Ramos no funciona, lo que ha llevado al vertido de aguas negras en las calles y, en ocasiones, en los campos de cultivo.
El agua en este lugar no está siendo tratada, lo que provoca un fuerte olor en la zona. Sin embargo, en noviembre, el Ayuntamiento de Chila planea demoler el espacio y construir una nueva planta.
Aguas negras en Acatlán
Hace más de un mes comenzaron los trabajos de rehabilitación del drenaje en calles del municipio de Acatlán de Osorio. Sin embargo, en algunas vías, el agua negra comenzó a emerger, molestando a los habitantes, quienes exigieron a las autoridades municipales acelerar los trabajos.
Después de que se publicara la queja de los vecinos de la calle Josefa Ortiz de Domínguez, se empezó a trabajar en el lugar para detener el flujo de agua negra.
No obstante, los habitantes de San Pablo Anicano informaron que el agua negra de Acatlán estaba llegando a su localidad, solicitando a las autoridades que evitaran la contaminación.
Aunque los pobladores indicaron la presencia de agua del drenaje, el 23 de noviembre el flujo aumentó y con un olor muy fuerte, afectando a los campesinos que tienen cultivos cerca del afluente, así como a los residentes cercanos.
Las autoridades municipales de San Pablo Anicano han informado a las autoridades correspondientes sobre el problema de las aguas negras de Acatlán, que ya están contaminando los pozos de agua.