Jorge García Canela, hoy con 28 años de edad, fue uno de los llamados “niños milagro”, por ser rescatado con vida de entre el lodo y los escombros en el desastre de 1999, ocurrido en la colonia La Aurora, por lo que a 20 años de este este acontecimiento, agradeció a los paramédicos y voluntarios que lograron su rescate, retornando a esta ciudad, para conjuntamente con el resto de la población, recordar a sus seres queridos.
De lo anterior, dijo que fueron tres niños los localizados en la zona del siniestro, entre ellos su hermana gemela y otro niño, del cual desconoce su paradero, lo cual recuerda con mucho dolor, puesto que, en el lugar perdió a su mamá y dos hermanas, cuando él contaba con solo 8 años de edad. “Un día en el que la colonia Aurora simplemente se cimbró, se empezó a levantar polvo y en cuestión de segundos, habría desaparecido”.
Al respecto, indicó haber perdido la noción el tiempo: “Mis recuerdos son que, todavía logré ver a una de mis hermanas, caminar todavía, pero momentos más tarde ya estaba bajo el lodo, ya no tenía visión de nada”.
Narró que su mamá vendía dulces típicos en el centro de la ciudad, de donde sacaba recursos para mantener a sus cuatro hijos, ya que era madre soltera.
Posterior a su rescate, dijo que fue atendido en el hospital regional, permaneciendo por algunos días, puesto que sus lesiones no fueron muy graves, a diferencia de lo que vivió su hermana gemela, quien sufrió mayores afectaciones en su organismo.
Según dio a conocer, luego de dicha atención médica, su hermana y él fueron dados en adopción con una familia, con la que pasaron la mayor parte de su infancia, recibiendo toda clase de ayuda por parte de los gobiernos y de la ciudadanía en general: “Yo era un niño y recibía ropa, calzado, hasta camas, lo recuerdo mucho, me llegaron muchas cosas”.
Actualmente, a 20 años de aquella tragedia, Jorge García Canela, se desempeña como locutor en una radiodifusora del municipio de Tlapacoyan, Veracruz. Su carrera la inició en Sicom Radio de Teziutlán, para luego trabajar en estaciones comerciales.
Ante ello, también dijo: “Quisiera yo conocer a la persona que nos rescató, tengo mucho que agradecerle, gracias a ellos estamos aquí”.
Al respecto, abundó que su agradecimiento va para toda la gente tanto voluntarios, ejército, autoridades, así como a la gente que estuvo ayudando en las maniobras de rescate, donde si bien como niño no tuvo conocimiento ni noción de quienes ayudaron, a 20 años de la desgracia regresó para hacer latente este agradecimiento, aunque ya no cuente con su familia.