CHIGNAUTLA, Pue.- Un niño de apenas año y medio de edad de nombre Luis Ángel Marcos Jiménez resultó con quemaduras de segundo grado en sus piernas, ya que por descuido de su abuela cayó en una olla con agua hirviendo.
El hecho ocurrió en su domicilio de la calle El Capulín de comunidad llamada Aguardientera, al filo del mediodía de hoy miércoles.
La abuela del infante estaba cocinando y dejó agua en la olla hirviendo en el suelo y como el menor apenas empieza a caminar se acercó al recipiente y se quemó hasta ocasionarle quemaduras de segundo grado en pierna izquierda y derecha, así como cadera y muslo.
Paramedicos de Protección Civil Municipal le realizaron los medios básicos dentro de la ambulancia y lo trasladaron al Hospital General.