En un esfuerzo por preservar una tradición que data de más de siete décadas, hombres originarios de Izúcar de Matamoros se han unido para mantener viva la elaboración del tradicional arco de cucharilla, una práctica emblemática que encabeza la celebración del Grito de Independencia cada 14 de septiembre en Izúcar de Matamoros.
De acuerdo con el cronista municipal Raúl Martínez Vázquez, dijo que existen documentos oficiales que respaldan la tradición del desfile y la instalación del arco de cucharilla. "Hay un oficio que autoriza la instalación de los arcos en la presidencia municipal, fechado en septiembre de 1951, por lo que se cree que fue por esas fechas cuando se empezaron a realizar los primeros arcos", explicó.
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Esta tradición, que en sus inicios adornaba las entradas de las iglesias durante las festividades patronales, fue adoptada para las fiestas patrias, siendo un símbolo de honor y gloria. Merced Montaño, el artesano más longevo en la elaboración de estos arcos, relató que comenzó a armarlos hace más de 50 años, siguiendo el ejemplo de sus padres y abuelos del barrio de Santa Catarina.
“Era una práctica común en los días previos a las fiestas patrias, las familias adornaban sus arcos con cucharilla para luego desfilarlos e instalarlos en el antiguo palacio municipal", comentó.
La planta de cucharilla, utilizada en la elaboración de los arcos, es recolectada de lugares con lluvias constantes, y su preparación puede llevar hasta 18 horas de trabajo, dependiendo de los adornos que se incluyan, además para armar un solo arco se requieren más de 22 cebollas de cucharilla, traídas de municipios como Tepexi de Rodríguez y Santa Inés Ahuatempan.
Aunque esta tradición había desaparecido temporalmente, fue retomada en 1979 bajo la administración del entonces presidente municipal Raúl Ramírez Pérez, quien a través de un cabildo aprobó nuevamente la instalación de los arcos en la presidencia municipal, ahora convertida en la expresidencia.
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Hoy en día, los catorce barrios de Izúcar de Matamoros elaboran sus propios arcos de cucharilla, muchos de los cuales son colocados en la expresidencia municipal durante las fiestas patrias, mientras que algunos barrios los instalan en sus inspectorías locales.
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Los artesanos señalan que aunque actualmente se elaboran más de tres arcos al año para diversas festividades, están comprometidos en seguir trabajando para que esta tradición no se extinga. A pesar de los desafíos, continúan esforzándose para que los arcos de cucharilla sigan siendo un emblema de identidad y orgullo para Izúcar de Matamoros.