Para este lunes está programada en Tetela de Ocampo la audiencia de juicio oral sobre el segundo presunto asesino de Isaí Hernández Villegas, agente del Ministerio Público Federal, asesinado en este municipio en 2014. Este caso dio origen al primer juicio oral en la Sierra Norte de Puebla en 2015 y fue pospuesto por errores administrativos, según informó la abogada y viuda, Liliana Lira.
La fuente mencionó que la audiencia de juicio oral no se llevó a cabo en mayo pasado, como estaba programado: "Estábamos todas las partes, pero apenas les llegó la carpeta de Zacatlán a Puebla... Me avisaron ya cuando llegué; te digo que esta justicia está muy colapsada". La audiencia fue reprogramada para este lunes a las 10 horas.
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Cabe recordar que este caso no solo es un referente de todas las fallas que tiene el sistema penal del Estado y del país, sino que también se convirtió en el motivo del primer juicio oral en la Sierra Norte de Puebla. Casi diez años después, solo hay un sentenciado, seis prófugos (tres de ellos identificados) y un fallo pendiente en la próxima audiencia, cuya fecha está por determinarse.
"La justicia tardía es también injusticia", dijo la entrevistada al hablar sobre la audiencia que se llevará a cabo el próximo lunes, relacionada con una persona que ya lleva dos años detenida, tras haber escapado y posteriormente estar vinculada a otro hecho violento que llamó la atención mediática nacional: el caso de "La Vida Negra", un multihomicidio ocurrido en el vecino estado de México. Aunque los implicados eran originarios de Hidalgo, una mujer asesinó a su esposo y sus hijos; fue detenida en Ciudad de México, y el inculpado aparentemente fue detenido por este asunto, lo cual no se ha podido corroborar al momento de la redacción de esta nota.
Como se ha vuelto costumbre, este juicio oral será en la capital poblana. El detenido se llama Daniel V. C., quien habría evadido la orden de aprehensión durante dos años debido a que un exagente público de Zacatlán no quería ejecutar este mandato judicial. Se tuvo que recurrir a otros medios legales para que se pudiera cumplir con dicha acción judicial. Fue detenido, aparentemente hubo un acto de cohecho que involucró a personal del juzgado zacateco; fue puesto en libertad, se promovió un amparo y, con ello, la orden de aprehensión se ejecutó en la Ciudad de México.
La detención habría ocurrido en julio de 2022 y la audiencia de juicio oral se llevará a cabo casi dos años más tarde. La cita en el juzgado el próximo lunes es importante porque, en caso de que haya una sentencia condenatoria, Daniel V. C. se convertiría apenas en el segundo sentenciado de los ocho involucrados en el asesinato de un agente del Ministerio Público Federal.
Diez años después de los hechos y nueve después de haberse iniciado la causa penal en un juicio oral, el proceso ha estado colmado de irregularidades cometidas por jueces, funcionarios públicos y otros actores judiciales, quienes fueron acusados de prácticas irregulares, incluso de corrupción, a pesar de la atención mediática que acaparó por tratarse del primer juicio oral en la Sierra Norte de Puebla. Así lo informó esta casa editorial, además del testimonio de la entrevistada con motivo de la próxima audiencia.
Lo irónico es que, a pesar de uno de los tantos amparos ganados por la víctima, promovido bajo el argumento de que la fiscalía había hecho lo necesario para lograr la detención de los tres agresores identificados, cuya resolución ordenaba que se cumplieran estas órdenes de aprehensión, a la fecha no ha ocurrido. La respuesta de la autoridad judicial se ha limitado a decir que "fueron a su casa, tocaron y no los encontraron o dijeron que no estaban", según los documentos proporcionados por la fuente.
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Actualmente, hay seis agresores prófugos, tres de ellos identificados y con orden de aprehensión pendiente desde hace nueve años. Los otros tres no han sido identificados y siguen sin ser llevados a juicio. Los hechos violentos en los que murió Isaí, que también lesionaron a su hoy viuda y a otra persona, ocurrieron el 31 de agosto de 2014, y la primera audiencia de juicio oral tuvo lugar en abril de 2015.
"Todo lo ocurrido manifiesta la inefectividad de este nuevo sistema judicial. La justicia retardada es igual a injusticia; si esto ocurre con un asesinato que involucró a un agente del Ministerio Público Federal, que acaparó la atención mediática, imagina cómo es en otros casos. Esto puede servir de indicador de lo difícil que es acceder a una justicia genuina en México; no quiero pensar lo que ocurre con otros delitos", finalizó.
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