Familiares y vecinos del presidente electo de Nopalucan, Félix Aguilar Caballero, alias El Tanque, rechazaron que haya estado vinculado con delitos como robo de hidrocarburo y asalto a trenes, como afirmaron la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y la Fiscalía General del Estado (FGE), por lo que solicitaron a las autoridades llevar a fondo las investigaciones para esclarecer el caso.
Fue al filo de las 11:30 horas de ayer cuando un cortejo fúnebre adornado con flores y globos blancos escoltó el féretro de Félix Aguilar hasta su domicilio de la calle 5 de Mayo y 4 Oriente, en pleno centro de Santa María Ixtiyucan, junta auxiliar de Nopalucan, donde participaron al menos un centenar de personas.
Con pancartas en mano un grupo de vecinos se plantó a la entrada de la comunidad, rechazando que la muerte del edil electo se haya tratado de una ejecución, al tiempo de responsabilizar a “Los Soto” y al dirigente estatal de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Leobardo Soto Martínez.
Durante el velorio los pobladores aseguraron que el político y exjudicial de 60 años de edad era “una persona de bien” y sostuvieron que las acusaciones en contra del difunto son injurias hechas por “Los Soto”, con quienes mantienen una disputa.
Los familiares exigieron justicia a la Fiscalía, pues afirmaron que se trató de un crimen político por las fuertes rencillas que había entre Félix y los dirigentes de la CTM, quienes mantienen un cacicazgo en la zona.
Trascendió que el cuerpo del edil será sepultado este miércoles en el panteón de Santa María Ixtiyucan, lugar de donde era originario y donde fue presidente auxiliar en dos ocasiones.
Cabe mencionar que las fricciones entre el alcalde asesinado y la organización tuvieron uno de sus puntos más álgidos durante la campaña electoral, previo a los comicios, cuando incluso la CTM denunció ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE) y la Fiscalía de Puebla al ahora occiso por el supuesto asalto e intento de secuestro de uno de sus compañeros.