En Tehuacán, la psicóloga Magdalena Leyva Castro, integrante del movimiento Valientes, alertó sobre la gravedad del abuso sexual infantil en México, que lamentablemente ocupa el primer lugar a nivel mundial en esta forma de violencia. Cada día, Leyva Castro atiende entre cuatro y cinco casos de niños víctimas de abuso sexual, lo que subraya la magnitud de este problema en esta región.
Leyva Castro destacó que, debido al miedo y la vergüenza que sienten las víctimas, muchos casos de abuso no se denuncian. Esta falta de denuncia perpetúa el ciclo de violencia y contribuye a que el problema persista sin ser abordado de manera adecuada. Alarmantemente, más del 60% de los agresores son familiares cercanos, como abuelos, tíos, primos e incluso padres, lo que intensifica el impacto emocional en los menores afectados.
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La psicóloga explicó que atiende a víctimas desde los 4 años, edad en la que los niños comienzan a verbalizar sus experiencias, hasta los 16 años. Es fundamental prestar atención a señales como pesadillas, retraimiento, tristeza inexplicable y, especialmente, conductas sexualizadas que no corresponden a su edad. Estos signos pueden ser indicativos de abuso sexual y deben ser tomados en serio para proporcionar la intervención adecuada.
Otro obstáculo importante en la lucha contra el abuso sexual infantil es la falta de denuncias oficiales. Los agresores a menudo intimidan a las víctimas para mantenerlas en silencio, lo que dificulta el acceso de las víctimas a la terapia y al apoyo que necesitan para recuperarse. Sin denuncias, los casos quedan sin el seguimiento necesario, y las víctimas no reciben la ayuda adecuada.
Además, la psicóloga subrayó los desafíos que enfrenta el sistema judicial en estos casos. Los procesos legales son frecuentemente largos, tediosos e interrumpidos antes de llegar a una resolución final, lo que deja a las víctimas sin la justicia que merecen. Incluso cuando se emite una sentencia, esta puede no reflejar adecuadamente el sufrimiento de la víctima, ya que a menudo no se consideran factores cruciales como la edad, el contexto social y familiar, y las experiencias individuales de los menores.
Los casos no se reflejan en la estadística de la Fiscalía General del Estado (FGE), que entre enero y julio de este 2024 ha documentado 23 casos de abuso sexual denunciados ante instancias ministeriales, así como 16 de acoso sexual, 14 por violaciones y 6 de hostigamiento sexual.
Movimiento valientes
El movimiento Valientes, al que pertenece Magdalena Leyva Castro, trabaja para establecer precedentes y crear conciencia sobre la magnitud de este problema. Su objetivo es fomentar que más víctimas rompan el silencio y reciban el apoyo necesario para sanar. Este movimiento busca no solo visibilizar el abuso sexual infantil, sino también impulsar cambios en las políticas y en el sistema judicial para que se ofrezca una protección y justicia más efectiva a las víctimas.
La labor de Leyva Castro y del movimiento Valientes es crucial en la lucha contra el abuso sexual infantil. Su trabajo diario y su compromiso con la causa son esenciales para abordar este grave problema que afecta a tantas familias y comunidades. Es fundamental que se continúe trabajando para derribar barreras, brindar apoyo adecuado a las víctimas y garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia de manera efectiva.
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El abuso sexual infantil es una crisis de dimensiones globales que requiere una respuesta coordinada. Solo a través de un esfuerzo conjunto, que incluya la denuncia oportuna y el apoyo profesional, se podrá avanzar hacia un entorno más seguro para niños y adolescentes, de ahí que el compromiso de personas como Magdalena Leyva Castro y el movimiento Valientes es un paso importante en esa dirección.
