Tehuacán, Pue.- Rezanderas de la ciudad de Tehuacán incrementaron sus costos por servicios ante el riesgo de contagio por Covid-19, ya que llegan a cobrar hasta 2 mil 500 pesos por novenario, siendo que antes de la pandemia pedían entre mil y mil 200 por esta actividad, refirió una trabajadora del gremio con más de 30 años dedicados a realizar oraciones en casas cuando hay un difunto.
Teresa, alias la “Güera” como es conocida en Tehuacán esta mujer que ofreces sus servicios en la colonia Monte Chiquito, con 30 años a cuestas que la respaldan como una profesional de la actividad de dirigir a Dios santas oraciones de sentido religioso, refirió que la Covid-19 los ha alcanzado y que compañeros suyos ya han fallecido después de haberse contagiado al acudir a rezar en la casa de alguna persona que murió a causa del virus que azora a la humanidad.
Indicó que, pese a que hay más trabajo, hay quienes están cobrando hasta 2 mil 500 pesos por novenario bajo el argumento de que el riesgo es mayor, ya que aseguró que esta actividad incrementó en las últimas semanas a raíz de las muertes relacionadas con el coronavirus, siendo para ellas una posibilidad de contagio lo que las ha llevado a elevar el costo por cada rezo.
Recordó que hace más de un año, quienes conocen a los que se dedican a esto cobraban por un rosario de cuerpo presente entre 100 y 150 pesos y que hoy día aumentó a 250 pesos.
Agregó que, ante el riesgo, ahora las rezanderas piden además de la respectiva cuota que les muestren el certificado de defunción para descartar que el motivo de muerte sea por Covid-19.
Creyente de Dios, dice que ella se cuida y se protege durante su labor, la cual considera que es necesaria en estos momentos en donde las familias necesitan de este apoyo al perder de manera repentina a sus familiares, por lo que a pesar de que su familia le dice que no acuda, ella toma las medidas sanitarias que considera le ayudan y brinda esta atención.
“Luego nos engañan… les preguntamos que de qué murió y nos dicen que de un infarto y pues confiamos en lo que nos dicen”, dijo, pero aseguró que muchas simplemente dicen que no van por miedo.
Detalló que, ante el incremento de fallecidos, en un día llega a tener hasta cinco rezos, lo que se traduce en un riesgo constante el estar yendo a casas que pudieran estar infectadas por Covid-19 al igual que sus ocupantes que son los que las contratan, por lo que ya para una “levantada de cruz” cobra hasta mil pesos.
Dijo que lamentablemente hay personas que se dedican a esto y que están aprovechándose de la necesidad de las familias, pues han sabido que hay quienes cobran hasta los 2 mil 500 pesos por los novenarios y piden además que vayan por la persona y que la regresen a su casa, siendo para ella un abuso, pues, recalcó que se trata de ayudar y no de aprovecharse de la situación.
Por último, señaló que durante el tiempo que se ha dedicado a esto no había visto tantos difuntos en la ciudad como ahora y que como ha ofrecido sus servicios a través de las redes sociales, constantemente le llaman, por lo que a veces simplemente les dice que no puede porque está saturada su agenda ya con citas ante esta situación lamentable por la pandemia.