La señora Susana Ronquillo decidió viajar para festejar los quince años de su hija en Puebla, sin embargo, ahora se siente defraudada ya que la empresa en la que confió para realizar el evento incumplió con su contrato y ofreció alimentos en estado de descomposición, motivo por el que ya la denunció ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
En entrevista con El Sol de Puebla explicó que en enero realizó un acuerdo para realizar la fiesta de su hija en el Salón Acrofest, ubicado en San Pedro Cholula, mismo que concretó en junio pasado a través de un contrato en el que el prestador de servicios se comprometió a ofrecer productos que no entregó.
Entre los incumplimientos enlistó la falta de agua, postres y hielo para los invitados, así como el hecho de que los alimentos que recibieron estaban en estado de descomposición, ya que provocaron enfermedad diarréica a los comensales.
“El evento tenía que empezar a las cinco y no dejaron entrar a la gente a esa hora, además a esta persona (el proveedor) se le ocurrió tener encerrada a la quinceañera y dejarla salir hasta que llegaran los invitados pero eso atrasó el protocolo y al final nos obligó a pagarle una hora extra por la ocupación del salón, a pesar de que él provocó el atraso”, dijo.
Proveedor se niega a enmendar sus deficiencias
Ronquillo señaló que el proveedor nunca accedió a reembolsar el costo de los servicios que dejó de prestar y tampoco tuvo la disposición de enmendar las deficiencias, ya que solo les argumentó que “el evento ya había pasado” y no podía hacer más al respecto.
Por lo anterior, dijo que acudió ante la Profeco a presentar una queja y ahí se enteró que el empresario incumplía con las normativas para la prestación de servicios, ya que a pesar de haber cobrado 150 mil pesos no estaba en regla ante la Procuraduría.
Asimismo, refirió que interpuso una denuncia ante la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) por la descomposición de los alimentos que le vendieron, a fin de solicitar la revisión de las normas de higiene con las que funciona el servicio de banquetes.
“Nosotros tenemos muchos años que no vemos a la familia, por el trabajo, la pandemia, entonces cuando vinieron los quince años queríamos reunirnos, esa era la intención, tener el gusto de convivir”, dijo al tiempo de expresar que las deficiencias del prestador de servicios arruinaron sus planes.
Finalmente, indicó que sólo espera que con la intervención de las autoridades logre recuperar los recursos económicos correspondientes a los servicios que dejó de recibir y que la empresa atienda a las normativas para evitar que en el futuro haya más personas defraudadas.