Las diputadas Mónica Rodríguez y Nora Merino del PAN y Morena respectivamente, se enfrentaron en la tribuna del Congreso del Estado por el conflicto que prevalece en la Universidad de la Américas Puebla (UDLAP) y se retaron para demostrar que el plantel permanece tomado por las autoridades estatales.
Al término de la comparecencia del titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Melitón Lozano Pérez, la diputada panista Mónica Rodríguez tomó la palabra y acusó al funcionario de evadir los cuestionamientos que su compañera de bancada, la legisladora Aurora Sierra, hizo sobre la participación de las autoridades en el cierre de las instalaciones del campus de la UDLAP en San Andrés Cholula.
Afirmó que en su calidad de representantes de la sociedad se debía emitir un exhorto por parte del poder legislativo para que las autoridades involucradas cumplan con los mandamientos de la justicia federal que establece la apertura del campus desde el pasado 7 de diciembre.
En respuesta, la diputada morenista Nora Merino, acusó al PAN de politizar el tema y dijo que las irregularidades en la UDLAP habían iniciado durante los gobiernos estatales de Acción Nacional, que permitieron operaciones irregulares con los bienes de la universidad.
Al debate en la tribuna se sumó también la diputada morenista, Azucena Rosas Tapia, quien aseguró que era una mentira que el gobierno estatal tuviera en posesión el campus de la UDLAP y acusó a los panistas de utilizan el tema como una oportunidad para la denostación y hacer una “apología del infundio”.
La diputada Mónica Rodríguez retó a Nora Merino a verificar personalmente que las instalaciones permanecían abiertas como se ha manifestado por parte de las autoridades estatales a lo que la diputada de Morena respondió que el campus permanece cerrado como parte del conflicto pero que no está tomado por el gobierno de Puebla como han acusado.
Antes, durante su comparecencia ante los diputados locales, el titular de la SEP, Melitón Lozano, afirmó que el conflicto de la UDLAP inicio antes de la llegada de la nueva administración, que el gobierno estatal no tenía injerencia, ni posesión del campus universitario.
A su llegada al recinto legislativo Melitón Lozano fue abordado por un padre de familia de la UDLAP que le pidió que sostuviera su dicho de abrir el campus, tal como se había comprometido con una comitiva de estudiantes con los que dialogo el jueves 9 de diciembre en Casa Aguayo.
