Hasta un 80 por ciento ha bajado la producción de ollas para las tradicionales piñatas que se rompen en posadas, acostadas del niño Dios y convivios navideños, señaló el presidente de la Agrupación de Alfareros y Artesanos de Texmelucan y Tenexyecac, Martín Vélez Hernández, por lo que ya son mínimas las piezas que se llegan a comercializar durante los días de tianguis.
Expresó que hace diez años los artesanos y alfareros esperaban con ansiedad que llegara la temporada navideña para elaborar y hornear alrededor de mil ollas de barro, las cuales se comercializaban a partir de la primera semana de diciembre, donde había personas que se llevaban de 1 a 3 piezas, y en mayoreo se llevaban de una a tres docenas.
Pero cada año que pasa, los artesanos y alfareros han dejado de elaborar las ollas de barro, porque actualmente la piñata que se comercializa en mayor cantidad es hecha a base de cartón, por lo que de 47 personas que se dedicaban a realizar y hornear ollas, solo son 2 o 3 que lo hacen y son quienes distribuyen la mercancía con el gremio para ser comercializada en la zona del tianguis, donde este año solo son 120 piezas las que se esperan que lleguen a venderse.
Vélez Hernández subrayó que los artesanos y alfareros llegaron a elaborar las piñas con ollas de barro de diferentes tamaños, que representaban buenas ventas para el gremio, sin embargo, cuando algunas personas empezaron a realizar la piñata de picos con cartón, esto vino a repercutir la venta, pues al hacer una comparación de que la primera valía 50 pesos, la segunda solo 30 pesos, era evidente que las personas adquirieran estas últimas por los bajos costos.
Finalmente, agregó que durante la temporada navideña las personas adquieren los productos de barro como las ollas, tazas y jarros debido a que estos conservan caliente el café, té y ponche que se ofrecen en los hogares durante las festividades decembrinas, así como se incrementa la venta de las imágenes de María, José, los Reyes Magos y Niño Dios que son elaboradas de yeso.