Una patrulla quemada, decenas de vidrios quebrados y demás disturbios en el edificio de la Presidencia Municipal de Pahuatlán fue el resultado de la reacción de habitantes indígenas de San Pablito y Xochimilco tras el asesinato de cuatro personas que "hablaban de política" la mañana de este miércoles 19 de mayo.
Los hechos se registraron cuando un grupo de al menos cuatro personas dialogaban sobre política en un establecimiento de reparación de llantas, lugar al que arribaron otras personas, al parecer contrarios políticos, y tras iniciar una discusión, uno de los que acaban de llegar abrió fuego contra ellos, dejando a tres fallecidos en el lugar, mientras que el cuarto perdió la vida camino a un hospital de la Sierra Norte.
Tras el homicidio, un contingente de la junta auxiliar de San Pablito y Xochimilco, de origen otomí, se amotinaron en el centro del pueblo mágico de Pahuatlán. Con piedras y palos vandalizaron la fachada de la presidencia municipal.
También volcaron una patrulla municipal y conforme fueron pasando los minutos la incendiaron, mientras hombres y mujeres se plantaron con pancartas en las afueras de la alcaldía exigiendo justicia para sus vecinos ultimados.
Recriminaron a la presidenta municipal, Guadalupe Ramírez Aparicio, que no haya reaccionado enviando a la policía municipal al lugar del homicidio para asegurar al o los culpables, también llegaron tarde elementos de la Policía Estatal y después se incorporaron elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano.
Los inconformes rechazaron un diálogo con autoridades policiacas y pidieron llamar a la Secretaría de Gobernación del estado y personal de la Secretaría de Gobernación federal con el fin de asegurar que se haga justicia.