Entre lágrimas, música de mariachi y danzas regionales,familiares y amigos de los 14 fallecidos por la trágica explosiónen San Isidro Chilchotla, les dieron el último adiós en una misade cuerpo presente a la que asistió toda la comunidad.
La misa se llevó a cabo a la una de la tarde y posteriormentellevaron los cuerpos al panteón que habilitó el Gobierno delestado después de la tragedia.
Los presentes a la ceremonia religiosa reconocieron que esteserá el festejo más triste de todos, pues aunque hoy tienenreflectores nacionales e internacionales, no estarán presentes las14 personas que perdieron la vida, entre ellas once menores deedad.
Desde la noche del martes, los cuerpos fueron recibidos entrecantos y flores, permanecieron en velación toda la noche.
Niños y adolescentes caminaron a lado de quienes fueron susamigos o compañeros de escuela, con quienes se echaban unacascarita de vez en cuando, para acompañarlos en su último andarpor las calles de San Isidro.