Solo 15 minutos bastaron para que gobernador Miguel Barbosa Huerta, diera a conocer en qué condiciones se encuentra la administración de Tehuacán. Dijo que tienen un faltante de 120 millones de pesos, que están “quebrados”, que se arrepiente de haberlos apoyado para que ganaran las pasadas elecciones y que está decepcionado de este gobierno.
Bajo un fuerte dispositivo de seguridad y con un palacio municipal cercado por vallas y policías, se llevó a cabo el primer Informe de Gobierno de Felipe Patjane Martínez, un evento privado en el que solo allegados pudieron estar en una pequeña sala del edificio público, mientras que afuera un grupo de habitantes se manifestaban.
Una vez que le dio lectura a su informe por algunos minutos, dijo estar comprometido para hacer un mejor trabajo en su segundo año, argumentando que cuenta con el apoyo del gobierno estatal, siendo contestado por la síndico, Laura Gallegos Sánchez, quien reconoció que se ha avanzado muy lento y que las bajas de funcionarios ha afectado la operatividad del gobierno.
Fue entonces cuando Miguel Barbosa Huerta, daría fin a este evento con su discurso, el cual inició señalando que la rendición de cuentas de los ediles, debía ser apegada a la realidad, de lo contrario la gente les reclamaría, puesto que de nada servía reunir a un grupo de allegados para que le aplaudieran su trabajo: “Si se es honesto, es austero y no se gasta el dinero del pueblo”, señaló.
El gobernador se comprometió hacer un edificio que albergará el Hospital Municipal, pues considera que en donde actualmente se encuentra debe ser una casa para la cultura y no para la salud, además de que se iniciarán los trabajos para un parque lineal por encima del dren de Valsequillo, el cual se entubará para que deje de contaminar la ciudad.
Barbosa Huerta habló de honestidad, recordando la teoría política de “no robar, no mentir y no traicionar”, lamentando que esta ciudad deje de ser la segunda en importancia en el estado, puesto que otros municipios han comenzado a repuntar gracias al trabajo de sus gobernantes municipales, señalando que la alternancia de gobiernos entre el PAN y el PRI, en esta ciudad, ha llevado al atrasó.
Dijo que se suponía que esta administración terminaría con esa alternancia, pero llenaron el gobierno de panistas y priistas, por lo que tuvo que pedir al edil que los sacara de la administración y que diera oportunidad a ciudadanos capaces de hacer un mejor trabajo, pero no lo entendió, permitiendo que gente del expresidente Eliseo Lezama Prieto, tenga infestado su gobierno.
Indicó que esta administración está “quebrada”, que tienen un adeudo de 120 millones de pesos, que no tienen estabilidad financiera y que para finales de año el estado tendrá que salvarlo: “Yo confié en ellos, porque si hubiera querido no hubieran sido candidatos, pero confié y me fallaron”, por lo que hoy tendrán que ayudarlos.
Una vez terminando su discurso, el cual provocó aplausos de los asistentes, Barbosa Huerta se colocó a un lado de Felipe Patjane Martínez y tras el término de la sesión, solo se estrecharon la mano y salió el gobernador por la puerta trasera, sin que ningún funcionario municipal lo acompañara a la puerta. Tanto el edil como regidores, inmediatamente ingresaron a una oficina sin dar declaraciones.
Cabe mencionar que una vez que los asistentes salieron del palacio municipal, tanto el diputado local, Fernando Sánchez Sasia y el diputado federal, Alejandro Barroso, fueron confrontados por los manifestantes, reclamándoles del por qué permitieron que el edil hiciera su informe bajo un fuerte operativo y sobre el incremento del pasaje.